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Sentencias de Nulidad por InconstitucionalidadRoberto Augusto Serrato Vald�sCorporaci�n Aut�noma Regional de Risaralda - CARDERJunta de Acci�n Comunal de la Vereda Pajares de Condinafalse08/04/2022Resoluci�n 0828 de 22 de mayo de 2018Identificadores10030275536true1409215original30237549Identificadores

El Despacho procede a resolver la solicitud de suspensi�n provisional de los efectos jur�dicos de la Resoluci�n 0828 de 22 de mayo de 2018[1], expedida por la Subdirecci�n de Gesti�n Ambiental Sectorial de la Corporaci�n Aut�noma Regional de Risaralda � CARDER.

1. La Junta de Acci�n Comunal de la Vereda Parajes de Condina, en ejercicio del medio de control previsto en el art�culo 73 de la Ley 99 de 1993, present� demanda ante esta corporaci�n judicial, con el fin de obtener las siguientes declaratorias:

[�] I. QUE SE DECLARE LA NULIDAD DE LA RESOLUCI�N 0828 DE 22 DE MAYO DE 2018 DE LA CORPORACION AUTONOMA REGIONAL DE RISARALDA � CARDER POR EXPEDICI�N MEDIANTE FALSA MOTIVACI�N (�)

II. QUE SE DECLARE LA NULIDAD DE LA RESOLUCI�N 0828 DE 22 DE MAYO DE 2018 DE LA CORPORACION AUTONOMA REGIONAL DE RISARALDA � CARDER POR EXPEDICI�N EN FORMA IRREGULAR EN RELACI�N A LAS SIGUIENTES NORMAS QUE TRANTAN SOBRE LOS REQUISITOS PARA LOS PERMISOS DE EMISIONES AL AIRE (�)

III. QUE SE DECLARE LA NULIDAD DE LA RESOLUCI�N 0828 DE 22 DE MAYO DE 2018 DE LA CORPORACION AUTONOMA REGIONAL DE RISARALDA � CARDER POR EXPEDICI�N CON INFRACCI�N DE LAS NORMAS EN QUE DEBER�A FUNDARSE. (�)

IV. QUE SE DECLARE LA NULIDAD POR CUALQUIER OTRA CAUSAL QUE EL HONORABLE CONSEJO DE ESTADO CONSIDERE PROBADA Y QUE NO HAYA SIDO INVOCADA. [�]

2. Este Despacho, mediante auto de 30 de junio de 2021[2], admiti� la demanda de nulidad y orden� la notificaci�n de dicha providencia al director general de la Corporaci�n Aut�noma Regional Risaralda �CARDER y a la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda., esta �ltima como tercera interesada en las resultas del proceso.

4. La parte actora manifest� que el 15 de noviembre de 2016, la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda. suscribi� un contrato de promesa de compraventa con los se�ores Sarita Valencia Henao y Jes�s Maurier Valencia Hern�ndez para adquirir el predio identificado con la matr�cula inmobiliaria 290-86727, ubicado en la vereda Pajares de Condina, corregimiento de Tribunas, C�rcega, jurisdicci�n del municipio de Pereira, departamento de Risaralda.

5. Destac� que el inmueble consta de 20.627 mts2 y est� dividido en dos �reas: un �rea de protecci�n forestal con 8.788 metros y un �rea en el que se proyecta realizar el �Parque CementerioSercofun Los Olivos Ltda� con 13.839 mts2.

6. Describi� que el lote destinado para el parque cementerio inicia en una franja angosta de terreno de 43 metros de frente y termina en una m�xima anchura de 68 metros que colinda con un barranco que se caracteriza por ser un �rea forestal protectora de la corriente h�drica denominada Quebrada Andahuaylas � Pe�itas. Adem�s, el barranco tiene una fuerte inclinaci�n de 89%.

7. Mencion� que la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda. construir�a una morgue y un horno crematorio de una chimenea, cuyos vertimientos de aguas residuales dom�sticas y no dom�sticas ser�n arrojados al barranco.

8. Se�al� que, en el �rea cercana al proyecto -esto es, dentro de los 800 metros en todas las direcciones desde el borde de la estructura del horno crematorio-, hay m�s de 45 casas de habitaci�n (algunas a 12.40 mts, 27,60 mts y 135 mts). Tambi�n el proyecto colinda con establecimientos de comercio, con el colegio Altos de Condina, con la Instituci�n Educativa La Bella, con la Unidad de Atenci�n de Bienestar Familiar para rehabilitaci�n de drogadictos, con la Fundaci�n Hogar para el Anciano Santa Mar�a, con el restaurante La Taza, con el Santuario de la Virgen de El Jord�n, con la Miscel�nea el Jord�n y con el vivero El Jard�n.

9. Plante� que, en un radio de 150 metros a partir del horno crematorio, tambi�n existen estructuras cercanas como �rboles, samanes, ficus, yarumos, urapanes con alturas superiores a las aprobadas para la chimenea. Es m�s, a menos de 13 metros hay un guadual de unos 4.000 metros de �rea con guaduas hasta de 20 metros de altura.

10. Inform� que, mediante oficio 12646 del 26 de octubre de 2017, Sercofun Los Olivos Ltda. present� documentaci�n t�cnica y legal ante la Corporaci�n Aut�noma Regional de Risaralda � CARDER, �para adelantar los tr�mites de Permisos y/o Autorizaciones de car�cter ambiental, que demandan el proyecto denominado Parque Cementerio SERCOFUN LOS OLIVOS LTDA�.

11. La CARDER evalu� y autoriz� el anterior proyecto a trav�s de la Resoluci�n 0828 de 22 de mayo de 2018.

12. En escrito separado[3], y con fundamento en las razones de inconformidad expuestas en la demanda, la parte actora solicit� la suspensi�n provisional de la Resoluci�n 0828 de 22 de mayo de 2018, por considerar que la misma est� viciada de falsa motivaci�n, expedici�n irregular e infracci�n de las normas que le sirven de fundamento.

13. Concretamente, los reparos jur�dicos de la parte actora se soportan en los siguientes supuestos:

14. La parte demandante afirm� que la resoluci�n acusada transgrede el numeral 4� del art�culo 2.2.3.3.5.2. del Decreto 1076 de 2015, porque la CARDER reconoci� a la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda. como poseedora y promitente compradora del predio identificado con la matr�cula inmobiliaria 290-86727, cuando en realidad la mencionada empresa no ten�a la condici�n de propietaria, ni la posesi�n ni la tenencia del mencionado inmueble.

15. Precis� que, con fecha 15 de noviembre de 2016, la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda. suscribi� un contrato de promesa de compraventa con los se�ores Sarita Valencia Henao y Jes�s Maurier Valencia Hern�ndez. Sin embargo, la cl�usula 8� de ese contrato establece que la entrega real y material del inmueble se realizar� con la firma de la escritura de compraventa, a lo que agreg� que, seg�n lo indica el certificado de libertad y tradici�n del mencionado inmueble de 5 de junio de 2021, ciertamente la firma de la escritura p�blica no se ha producido.

16. En su criterio, los motivos que sirvieron de sustento al acto acusado son falsos porque la CARDER reconoci� a Sercofun Los Olivos Ltda. con una calidad que no ostentaba, toda vez que los propietarios del predio identificado con la matr�cula inmobiliaria 290-86727, ubicado en la vereda Pajares de Condina, siguen siendo los se�ores Sarita Valencia Henao y Jes�s Maurier Valencia Hern�ndez.

17. Tambi�n indic� que Sercofun Los Olivos Ltda. no diligenci� la casilla del Formulario �nico Nacional de Solicitud de Permiso de Vertimientos que identifica la calidad de propietario, poseedor o tenedor del lote objeto de los permisos. Y tampoco aport� los documentos que comprobaran la posesi�n, lo cual es contrario al numeral 4� del art�culo 2.2.3.3.5.2. del Decreto 1076 de 2015, y a lo dispuesto en los Decretos 02 de 1982 y 948 de 1995.

18. Aunado a lo anterior, advirti� que no existe legalmente la calidad de �promitente comprador�, y resalt� que la promesa no concede la posesi�n y la tenencia de un bien.

19. Agreg� que la Resoluci�n 1628 de 28 de agosto de 2018 -que modific� parcialmente la Resoluci�n 0828 de 22 de mayo de 2018- develaba el error de la CARDER, pues el citado acto reconoce que: �la Corporaci�n incurri� en un error al aprobar la Demarcaci�n de Suelos de Protecci�n a nombre del promitente comprador del predio�, a lo que agrega que: �el permiso de Demarcaci�n de Suelos de protecci�n fue aprobado a nombre de los se�ores JES�S MAURIER VALENCIA HERN�NDEZ y SARITA VALENCIA HENAO, siendo estos quienes a�n configuran como propietarios del predio en los folios (sic) de matr�cula inmobiliaria�.

20. Tambi�n afirm� que los propietarios en ning�n momento solicitaron dicha modificaci�n o aprobaci�n de la demarcaci�n.

21. La parte actora explic� que la decisi�n de la administraci�n desconoce el derecho a gozar de un ambiente sano y el derecho a la salud de las personas que residen en las zonas cercanas al cementerio y al horno crematorio, dado que esa actividad �impacta al medio ambiente, la salud humana y la calidad de vida de los habitantes� y es contraria a lo dispuesto en los art�culos 2�, 8�, 29, 79 y 95 de la Constituci�n Pol�tica.

22. Frente al desconocimiento de los art�culos 3�, 5� y 6� de la Ley 1751 de 2015, se�al� que la CARDER es la entidad encargada de administrar y velar por el medio ambiente y los recursos naturales. Sin embargo, en la Resoluci�n 0828 de 2018 no asegur� �el bienestar y la salud humana (�) de la comunidad aleda�a al proyecto del �Parque Cementerio SERCOFUN Los Olivos Ltda. (�) por el contrario permiti�un impacto que afecta el disfrute del derecho fundamental a la salud y lleva al deterioro de la salud, el medio ambiente y la calidad de vida de los habitantes de las zonas cercanas�.

23. Sostuvo que la actividad de incineraci�n o quema de sustancias est� sujeta a un control prioritario porque produce emisiones contaminantes y t�xicas, seg�n lo previsto en los art�culos 2.2.5.1.2.2. y 2.2.5.1.7.2. del Decreto 1076 de 2015.

24. Advirti� que el cat�logo informativo del fabricante de hornos crematorios -en el cual se afirma que la maquina cumple con la normatividad respecto de los valores m�ximos permitidos de emisi�n de contaminantes-, no resultaba suficiente para satisfacer �las condiciones m�nimas que se deben tener en cuenta, tanto para la instalaci�n del sistema de monitoreo, como los criterios para el permiso de emisiones atmosf�ricas�.

25. Explic� que la CARDER ten�a -y no cumpli�- los siguientes deberes: �a. Realizar un an�lisis de la naturaleza de la actividad que se desarrolla, b. Se�alar las caracter�sticas de peligrosidad de los contaminantes, c. Establecer los riesgos que esta actividad representa para el medio ambiente y la salud de las personas�, todo lo anterior, de conformidad con lo dispuesto en el par�grafo 1� del art�culo 2.2.5.1.7.2. del Decreto 1076 de 2015.

26. Record� que, de acuerdo con la Resoluci�n 909 de 2008, los contaminantes causan efectos adversos al medio ambiente, a los recursos renovables y a la salud humana. Adem�s, seg�n la Resoluci�n 2153 de 2010, los hornos crematorios, debido a la calcinaci�n, emiten material particulado, mon�xido de carbono, dioxima, furanos y productos vol�ties.

27. En ese sentido, explic� que el �rea de influencia del proyecto ten�a un radio de 800 metros, seg�n lo dispuesto por la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda., y agreg� que las part�culas contaminantes por hornos crematorios pod�an extenderse m�s all� de ese per�metro, en raz�n a que: �sus descargas se extiende a grandes distancias en funci�n del viento y otras variables, adem�s la contaminaci�n producida en la zona (�) puede moverse "fuera" del sistema: a) Hacia las aguas subterr�neas por fen�menos de infiltraci�n; b) Hacia otras zonas por agua de lluvia que los traslade superficialmente (escorrent�a), y c) Hacia zonas habitadas, cultivos y otras instalaciones por efecto del viento�, de acuerdo con la Fundaci�n para la Defensa del Ambiente -FUNAM,

28. Indic� que, de conformidad con lo dispuesto en el art�culo 75 de la Resoluci�n 909 de 2008 y en el numeral 3.5.1. de la Resoluci�n 2153 de 2010, la autoridad ambiental ten�a el deber de corroborar las condiciones m�nimas para la instalaci�n de un monitoreo de emisiones y, en especial: �la cercan�a de las concentraciones de los contaminantes emitidos por la fuente con los est�ndares m�ximos de emisi�n admisibles, los datos obtenidos de estudios de calidad del aire realizados en la zona donde se encuentra ubicada la fuente, las caracter�sticas de peligrosidad de los contaminantes emitidos y las poblaciones o grupos cercanos a la fuente (�) y de los riesgos que esta representa para el medio ambiente y para la salud de las personas�.

29. Manifest� que, no obstante lo anterior, la CARDER no mencion�: �la poblaci�n de la zona donde est� ubicado el horno crematorio, evidenciada por la existencia de casas de habitaci�n, conjuntos residenciales y establecimientos de servicios y comercio�, y agreg� que tampoco realiz� �el estudio requerido por las normas citadas sobre la peligrosidad de los contaminantes y el riesgo para el ambiente, la salud y la calidad de vida de los habitantes de las zonas cercanas al cementerio y horno crematorio�.

30. Respecto de la transgresi�n de los puntos 4.3 y 4.5 de la Resoluci�n 2153 de 2010, explic� que la altura de la chimenea debi� fijarse a partir de un estudio que incorporara variables relacionadas con la presencia de estructuras cercanas, con las dimensiones de la estructura y con la direcci�n predominante del viento. Lo anterior, debido a que influencia de esas estructuras puede interferir en la dispersi�n de los contaminantes.

31. Anot� que, para determinar las estructuras cercanas, era necesario establecer: i) la regi�n cercana a la fuente de emisi�n que corresponde a 800 metros en todas las direcciones desde el borde de la estructura, y ii) si las estructuras se encuentran entre la direcci�n predominante del viento y la fuente de emisi�n.

32. En cuanto a la transgresi�n del numeral 4.4. de la Resoluci�n 2153 de 2010, afirm� que la CARDER desconoci� las buenas pr�cticas de ingenier�a que ordenaban conocer la direcci�n predominante del viento y analizar el impacto de las emisiones de contaminantes en la calidad del aire en la zona en que se encuentren ubicadas.

33. Destac� que el permiso de emisiones atmosf�ricas tuvo en cuenta el comportamiento de la direcci�n de los vientos medidos por una estaci�n no representativa.

34. Explic� que: �el IDEAM no cuenta con estaciones meteorol�gicas con sensores de vientos cercanas al sitio de su inter�s y la m�s pr�xima se encuentra a 15 kil�metros y no es representativa para describir la variable viento�. Adem�s, la estaci�n est� �a una altura 1346 msnm que es totalmente distinta al predio que est� aproximadamente a 1.900 metros sobre el nivel del mar�, seg�n la comunicaci�n del IDEAM de 15 de mayo de 2019.

35. Aclar� que cerca al proyecto: �existe un buen n�mero de �rboles frondosos, samanes, ficus, yarumos, urapanes de alturas superiores a las aprobadas para la chimenea e, incluso, a menos de 13 metros hay un guadual de unos 4.000 metros de �rea con guaduas hasta de 20 metros de altura. Fuera de esto hay tres casas de habitaci�n a menos de 150 metros contados a partir de la fuente de la chimenea o fuente de emisi�n del horno crematorio, (�) no solamente viviendas, sino establecimientos de comercio y servicios, y por lo tanto una poblaci�n apreciable que se ver�a afectada con mala calidad del aire�.

36. As� las cosas, la actora adujo que la CARDER �omiti� considerar la existencia y dimensiones de estructuras cercanas a los hornos crematorio (�) de haberlo hecho cambiar�an todos los c�lculos de la altura y caracter�sticas de la chimenea (�) lo que puede afectar la dispersi�n de los contaminantes generados�.

37. La parte demandante asegur� que los art�culos 1� y 2� del acto demandado violan el numeral 5� del art�culo 2.2.3.3.5.3. del Decreto 1076 de 2015, y se sustentan en hechos que eran �falsos o no est�n debidamente probados dentro de la actuaci�n administrativa�.

38. Espec�ficamente, refiri� que la Evaluaci�n Ambiental de Vertimiento de Aguas debe contener como m�nimo una �predicci�n a trav�s de modelos de simulaci�n de los impactos que cause el vertimiento en el cuerpo de agua y/o al suelo�, de acuerdo con el numeral 5� del art�culo del decreto ibidem. Sin embargo, Sercofun Los Olivos Ltda., en su solicitud, destac� que: �no se requer�a elaborar un modelo de simulaci�n ya que los efluentes tratados ser�n infiltrados al suelo y no descargados a un cuerpo de agua�.

39. Para la parte actora, Sercofun Los Olivos Ltda. debi� predecir los impactos que causan los vertimientos de aguas dom�sticas y no dom�sticas del cementerio en la Quebrada Andahuaylas y en el suelo.

40. Respecto del desconocimiento del numeral 8� del art�culo 2.2.3.3.5.3. del Decreto 1076, el demandante record� que la Evaluaci�n Ambiental deb�a contener la �posible incidencia del proyecto, obra o actividad en la calidad de la vida o en las condiciones econ�micas, sociales y culturales de los habitantes del sector o de la regi�n en donde pretende desarrollarse�.

41. Sin embargo, Sercofun Los Olivos Ltda. se limit� a mencionar que: �el Parque Cementerio SERCOFUN Los Olivos de Pereira, representa un impacto positivo para la regi�n, en la medida en que �sta ampliar� la capacidad de servicios f�nebres ofrecidos a los beneficiarios de la Empresa; por otro lado, las contribuciones hechas por concepto del pago de obligaciones tributarias, impuestos y servicios p�blicos, le generar�n al municipio de Pereira recursos para invertir en la gesti�n del territorio�.

42. En su criterio, el solicitante no estableci� la incidencia del proyecto en las condiciones econ�micas, sociales y culturales de los habitantes del sector, as� como tampoco precis� cu�les eran las medidas que se adoptar�an para evitar o minimizar los efectos negativos de orden socio cultural que pueden derivarse de la misma.

43. Igualmente, consider� que la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda. deb�a advertir las edificaciones que rodean al proyecto, el alto flujo de transporte del corredor vial en donde se ubica y los altos niveles de contaminaci�n atmosf�rica que genera el tr�fico vial de las carrozas f�nebres y los familiares que asisten al sepelio.

44. La parte demandante explic� que la decisi�n de la administraci�n desconoce los derechos a gozar de un ambiente sano y el deber del Estado de conservar las riquezas naturales de la naci�n, la diversidad e integridad del ambiente y los recursos naturales del pa�s, prevista en los art�culos 2�, 8�, 79 y 95 de la Constituci�n Pol�tica.

45. Destac� que el vertimiento de aguas residuales dom�sticas y no dom�sticas producir� efectos en el barranco y en el recurso h�drico que colinda con el proyecto del cementerio. Adem�s, ese territorio est� catalogado como zona de protecci�n de la Quebrada Andahuaylas.

46. Precis� que el proyecto estaba localizado en �La Gran Cuenca: R�o Cauca. Cuenca: R�o Consota. Subcuenca: sin. Microcuenca: Quebradas La Estrella � El Aguacate. Nombre de la Corriente: Quebrada Andahuaylas�.

47. Agreg� que las aguas de la Quebrada Andahuaylas son aprovechadas para el consumo humano, agropecuario y como corredores tur�sticos. Espec�ficamente, sobre el uso del suelo, predominan �los cultivos de mora, lulo, champi�ones, yuca, pl�tano, frijol (�) pastos manejados�, tal y como lo reconoce el estudio de suelos del corregimiento de Tribunas, presentado por Sercofun Los Olivos Ltda.

48. Frente a la infracci�n del art�culo 162 de la Ley 9 de 1979, se�al� que la construcci�n de un cementerio junto a un barranco est� prohibida debido al �riesgopara el medio ambiente y la salud� que ello implica. No obstante lo anterior, el proyecto colinda con un barranco que hace parte de la franja forestal protectora de la Quebrada Andahuaylas, cuya pendiente es de 89 % y dimensi�n de 97 metros a partir de la l�nea del cauce natural.

49. En ese orden, se�al� los siguientes riesgos relacionados con el sistema de vertimientos de aguas residuales en la zona de protecci�n y de la quebrada Andahuaylas:

[�] a. Que las aguas con residuos contaminantes y peligrosos al infiltrarse en el suelo con una pendiente del 89 % lleguen hasta la quebrada Andahuaylas

b. Que las aguas con residuos contaminantes y peligrosos al infiltrarse en el suelo con una pendiente de 89% pueda aflorar f�cilmente en el �rea de zona de protecci�n de la quebrada Andahuaylas, con evidente riesgo para la salud de los habitantes de la zona y la afectaci�n a la calidad de vida por los olores nauseabundos que se difundir�an.

c. Que colapse el sistema de vertimientos con el consiguiente da�o ambiental y peligros para la salud

d. Que por infiltraci�n en el terreno de un gran caudal de aguas residuales que sumadas a la alta frecuencia de lluvias en la regi�n y tener el terreno una pendiente del 89% hasta la quebrada Andahuaylas, se puede causar un deslizamiento de tierra que no s�lo contaminar�a la quebrada Andahuaylas, sino que podr�a represarla y causar una avalancha con un gran riesgo para los habitantes que est�n cerca a su cauce en su transcurso hasta el r�o Consota.

e. Que por la infiltraci�n de un gran caudal por un terreno con una pendiente del 89% se ver� agravada con las intervenciones sobre estos terrenos proyectados por el cementerio �Dentro de la faja de protecci�n, se ubicar� un sendero peatonal delimitado por especies arb�reas; alrededor de estas se instalar� cenizarios, los cuales no afectar�n la regeneraci�n de la vegetaci�n espont�nea por sucesi�n natural. Tambi�n se contempla el uso de algunas estructuras liviana proyectadas como zonas de recreaci�n pasiva, dicha �rea no exceder� el 10% de la zona de protecci�n de la fuente h�drica.� [�]

50. De acuerdo con el punto 9 y 11 de la Evaluaci�n Ambiental de Vertimiento, record� que las aguas �residuales no dom�sticas y aguas residuales dom�sticas�. �se infiltrar�n en el suelo�. Frente a ello, advirti� que los vertimientos corresponder�an a un �caudal de descarga expresada en litros por segundo es de 0,68229l/s�, es decir �58.939,20 litros por d�a�, lo que representaba un riesgo para la salud y el medio ambiente.

51. Sobre el vertimiento de aguas no dom�sticas, indic� que la principal actividad que los generaba era �la preparaci�n de cad�veres (�) donde se realizan los procedimientos de lavado y preservaci�n de cuerpos�, �extracci�n de fluidos corporales�, utilizando �l�quidos para inyecci�n cadav�rica correspondientes a una mezcla de formaldehido, acido f�nico, glicerina, alcohol industrial, solvente sangu�neo y agua, que suministran al cuerpo utilizando dos tipos de inyectores�.

52. Respecto del vertimiento de aguas dom�sticas, relat� que estaba compuesto por �materia fecal, orina, jab�n y restos de alimentos; poseen olor desagradable por el exceso de materia org�nica en descomposici�n y color que con el tiempo va adquiriendo tomo gris�ceo�.

53. En cuanto al desconocimiento del numeral 4� del art�culo 35 de la Resoluci�n 5194 de 2010[8], manifest� que el cementerio debe ubicarse en el sitio destinado por el Plan de Ordenamiento Territorial - POT del municipio o distrito y debe estar alejado de industrias, actividades comerciales, viviendas, conjuntos residenciales, lugares de recreaci�n, botaderos a cielo abierto, rellenos sanitarios, planta de beneficio, plazas de mercado y colegios. Aun as�, en la regi�n cercana del predio autorizado �se encuentran m�s de 50 viviendas y varios establecimientos de comercio y servicios�.

54. Frente a la transgresi�n del art�culo 2.2.5.1.3.4. del Decreto 1076 de 2015, seg�n el cual �queda prohibido el funcionamiento de establecimientos generadores de olores ofensivos en zonas residenciales�, mencion� que la actividad autorizada produce los olores ofensivos enunciados en la tabla 1 del art�culo 5� de la Resoluci�n 1541 de 2013.

55. Agreg� que los documentos soporte de la solicitud del proyecto reconocen que esa actividad producir�a olores ofensivos como �olor a H2S (huevo podrido o alcantarilla)�.

56. Insisti� en que la mencionada sociedad �no dijo nada sobre cu�l es el �rea en que se van a dispersar esos contaminantes� y �no present� ning�n estudio sobre la comunidad afectada por el tipo y peligrosidad de los residuos generados tanto por los vertimientos de aguas dom�sticas y no dom�sticas como por las emisiones del horno crematorio, y ni siquiera de manera general sobre la �regi�n cercana� o �rea �de dispersi�n de las emisiones molestas��

57. Se�al� que el �Estudio Epidemiol�gico del Horno Crematorio del Norte de la Localidad de Barrios Unidos�, elaborado por la Secretaria Distrital de Salud de Bogot� en el a�o 2014, y la �Revisi�n a la Gesti�n P�blica frente al control de las emisiones atmosf�ricas a las fuentes fijas de los hornos crematorios en la ciudad�, elaborada por la Personer�a Delegada para la Protecci�n del Ambiente y Asuntos Agrarios y Rurales de Bogot� del a�os 2018, dan cuenta de que esa actividad genera olores ofensivos.

58. En lo que ata�e a la transgresi�n del numeral 6� del art�culo 1� de la Ley 99 de 1993, agreg� que esa autoridad no aplic� el principio de precauci�n cuando otorg� el �permiso de vertimientos de aguas dom�sticas y no dom�sticas y permiso de emisiones atmosf�ricas de un horno crematorio que producen residuos y emisiones peligrosas, siendo que existe peligro de da�o grave e irreversible al medio ambiente y a la salud de los habitantes de las �reas de influencia del proyecto�.

59. Al respecto, mencion� que los hornos crematorios: i) generan contaminaci�n de primer grado; ii) producen contaminantes t�xicos que pueden causar c�ncer, enfermedades agudas o defectos de nacimiento y mutaciones gen�ticas; iii) emiten residuos peligrosos, y iv) generan residuos hospitalarios, tal y como lo reconocen los numerales 3 y 4.2.1. de la Resoluci�n 01164 de 2002.

60. De la solicitud de medida cautelar se corri� traslado[9] a la entidad demandada y al tercero con inter�s vinculado al proceso, para que se pronunciaran sobre la misma en el t�rmino de cinco d�as (5) d�as, de conformidad con lo establecido en el art�culo 233 del CPACA.

61. El apoderado judicial de la Corporaci�n Aut�noma Regional de Risaralda[10] solicit� negar el decreto de la medida cautelar de la referencia, tras afirmar que la demandante no acredit� los requisitos previstos en el art�culo 231 del C�digo de Procedimiento Administrativo y de lo Contencioso Administrativo, y tampoco demostr� el perjuicio irremediable.

62. Tambi�n manifest� que en esta etapa procesal resultaba prematuro declarar la suspensi�n provisional del acto demandado por cuanto se requer�a de un mayor an�lisis probatorio.

63. Adem�s, sostuvo que los permisos proferidos por la CARDER fueron otorgados con el lleno de los requisitos legales, como lo fue el �Concepto de Uso conforme del Suelo�, expedido por la autoridad competente, de acuerdo con el art�culo 51 del Decreto 1469 de 2010, compilado por el Decreto 1076 de 2015.

64. Al respecto, asegur� que la �CARDER no tiene a su cargo el seguimiento y control de las licencias urban�sticas, por lo tanto, quien define los retiros de la actividad desde sus cerramientos hasta las unidades habitacionales es el municipio a trav�s del POT; y por tanto la licencia urban�stica, restringe que sobre el suelo de protecci�n no se desarrollen actuaciones contrarias a los mismos�.

65. Mencion� que en el interior de la Resoluci�n 828 de 22 de mayo de 2018, as� como en el concepto t�cnico 00207 del 05 de febrero de 2018 (aclarado por el concepto t�cnico 00821 del 20 de marzo de 2018 y su vez modificado por el concepto t�cnico 001468 del 10 de mayo de 2018) se encuentran todas las razones de hecho y de derecho que desvirt�an los argumentos expuestos por la parte actora en la solicitud cautelar.

66. Sobre la calidad de poseedor de Sercofun Los Olivos Ltda., asegur� que si bien el art�culo 8� de la promesa de compraventa establece que la entrega del inmueble ser�a en la fecha de la firma de la escritura p�blica de compraventa, tambi�n es cierto que el par�grafo 1� del art�culo ibidem autoriz� a los promitentes compradores para que adelantaran las gestiones arquitect�nicas y de planeaci�n requeridas para adecuar las instalaciones. Por tal motivo, la mencionada sociedad se encontraba facultada para realizar los tr�mites ante la CARDER.

67. Aunado a lo anterior, se�al� que seg�n el Acuerdo 28 de 2011, la CARDER como m�xima autoridad ambiental puede, de manera oficiosa y sin consentimiento de los propietarios, poseedores o tenedores de predios, imponer demarcaciones a los cuerpos de agua en virtud de la funci�n social y ecol�gica que cumple la propiedad inmueble. Adem�s, indic� que la demarcaci�n de 97 metros que suscribi� la demandada en el acto acusado corresponde a la faja paralela del cuerpo de agua de la Quebrada Andahuaylas � Pe�itas, de acuerdo con el literal d) del art�culo 83 del decreto ley 2811 de 1974 y el �rea de protecci�n o conservaci�n aferente.

68. Record� que, seg�n el literal b) del art�culo 3� del Decreto 1449 de 1977, los propietarios de las �reas forestales protectoras est�n obligados a mantenerlas en cobertura boscosa. Precis� que la faja no inferior a 30 metros de ancha paralela a las l�neas de mareas m�ximas, a cada lado de los cauces de r�os, quebradas y arroyos era considerada como �rea forestal protectora. Tambi�n mencion� que, de acuerdo con el Decreto 1250 de 1970 y la Resoluci�n 10551 de 2013, la limitaci�n y la afectaci�n de car�cter ambiental se aplica sin perjuicio de la existencia de otros grav�menes, por tratarse de una limitaci�n de car�cter ambiental, la cual no sustrae el bien inmueble del mercado, sino que limita el uso del �rea demarcada.

69. Por otro lado, sobre el permiso de emisiones atmosf�ricas, mencion� que el Decreto 948 de 1995 estableci� que se debe contar con informaci�n meteorol�gica del �rea afectada. De all� que, Sercofun Los Olivos Ltda. halla presentado la informaci�n de la Estaci�n Aeropuerto Mateca�a porque no existe otra estaci�n similar en el �rea de influencia del proyecto, obra o actividad. Precis� que lo m�s importante era �la tendencia, y la tendencia se mide por la antig�edad; raz�n por la cual, la mayor precisi�n en la tendencia la ofrece la estaci�n aeropuerto mateca�a�.

70. De la altura de las chimeneas o ductos, manifest� que la CARDER tom� los criterios de distancia que present� el peticionario. Adem�s, advirti� que hasta que la mencionada actividad no est� en funcionamiento, es imposible determinar si genera olores ofensivos.

71. Sobre el permiso de vertimientos, insisti� en que la CARDER tuvo en cuenta el certificado de uso del suelo expedido por el curador urbano. Y que los dise�os, componentes y metodolog�a del sistema de vertimientos se encuentran claramente descritos en el concepto t�cnico de evaluaci�n del permiso.

II.2. El apoderado judicial de la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda. no se pronunci� sobre la solicitud de la medida cautelar[11].

72. Para efectos de resolver la solicitud de decreto de medida cautelar y por razones metodol�gicas, la Sala Unitaria empezar� por efectuar: (i) un an�lisis de las medidas cautelares en el proceso contencioso administrativo; (ii) un estudio de la medida cautelar consistente en la suspensi�n provisional de los efectos de un acto administrativo; para posteriormente (iii) determinar si es procedente efectuar un pronunciamiento de fondo en tanto el acto demandado este produciendo efectos jur�dicos y (iv) consecuentemente resolver cada uno de los reparos formulados.

73. Uno de los motivos que inspiraron la expedici�n del nuevo del C�digo de Procedimiento Administrativo y de lo Contencioso Administrativo CPACA - Ley 1437 de 2011, est� relacionado con el fortalecimiento de los poderes del juez. Fue as� como el nuevo C�digo cre� un moderno y amplio r�gimen de medidas cautelares, adicionales a la suspensi�n provisional de actos administrativos, y en su art�culo 229 le da una amplia facultad al juez para que decrete las medidas cautelares que estime necesarias para �proteger y garantizar, temporalmente, el objeto del proceso y la efectividad de la sentencia�.

74. En esta �ltima disposici�n (art. 229) se indica que las medidas cautelares proceden: i) en cualquier momento; ii) a petici�n de parte -debidamente sustentada; y iii) en todos los procesos declarativos promovidos ante la Jurisdicci�n de lo Contencioso Administrativo.

75. En cuanto al compendio de medidas cautelares que hace en el CPACA en su art�culo 230, es importante resaltar su clasificaci�n como: i)preventivas (numeral. 4), cuando impiden que se consolide una afectaci�n a un derecho; ii)conservativas (numeral 1 primera parte), si buscan mantener o salvaguardar un statu quo; iii) anticipativas (numerales 1 segunda parte, 2 y 3), de un perjuicio irremediable, por lo que vienen a satisfacer por adelantado la pretensi�n del demandante; y iv) de suspensi�n (numerales 2 y 3), que corresponden a la medida tradicional en el proceso contencioso administrativo de privaci�n temporal de los efectos de una decisi�n administrativa.[12]

76. En cuanto a los criterios de aplicaci�n que debe seguir el juez para la adopci�n de una medida cautelar, como ya se anunci�, �ste cuenta con un amplio margen de discrecionalidad, si se atiende a la redacci�n de la norma que se�ala que �podr� decretar las que considere necesarias�[13]. No obstante lo anterior, a voces del art�culo 229 del CPACA, su decisi�n estar� sujeta a lo regulado en dicho Estatuto, previsi�n que apunta a un criterio de proporcionalidad, si se armoniza con lo dispuesto en el art�culo 231 �dem, seg�n el cual para que la medida sea procedente el demandante debe presentar �documentos, informaciones, argumentos y justificaciones que permitan concluir, medianteunjuicio de ponderaci�n de intereses, que resultar�a m�s gravoso para el inter�s p�blico negar la medida cautelar que concederla�. (negrillas fuera del texto)

77. Sobre este asunto, la Sala Plena de lo Contencioso Administrativo de esta Corporaci�n, en providencia de 17 de marzo de 2015 (Expediente n�m. 2014-03799, Consejera Ponente: Sandra Lisset Ibarra V�lez), se�al�:

[�] La doctrina tambi�n se ha ocupado de estudiar, en general, los criterios que deben tenerse en cuenta para el decreto de medidas cautelares, los cuales se sintetizan en el fumus boni iuris y periculum in mora. El primero, o apariencia de buen derecho, se configura cuando el Juez encuentra, luego de una apreciaci�n provisional con base en un conocimiento sumario y juicios de verosimilitud o probabilidad, la posible existencia de un derecho. El segundo, o perjuicio de la mora, exige la comprobaci�n de un da�o ante el transcurso del tiempo y la no satisfacci�n de un derecho [�][14] (negrillas fuera del texto).

78. Por su parte, la Secci�n Tercera, mediante auto de 13 de mayo de 2015 (Expediente n�m. 2015-00022, Consejero Ponente: Jaime Orlando Santofimio Gamboa), sostuvo lo siguiente:

[�] Lo anterior quiere significar que el marco de discrecionalidad del Juez no debe entenderse como de arbitrariedad, raz�n por la cual le es exigible a �ste la adopci�n de una decisi�n judicial suficientemente motivada, conforme a los materiales jur�dicos vigentes y de acuerdo a la realidad f�ctica que la hagan comprensible intersubjetivamente para cualquiera de los sujetos protagonistas del proceso y, adem�s, que en ella se refleje la pretensi�n de justicia, raz�n por la cual es dable entender que en el escenario de las medidas cautelares, el Juez se enfrenta a la exposici�n de un razonamiento en donde, adem�s de verificar los elementos tradicionales de procedencia de toda cautela, es decir el fumus boni iuris y el periculum in mora, debe proceder a un estudio de ponderaci�n y sus sub principios integradores de idoneidad, necesidad y proporcionalidad stricto sensu, ya que se trata, antes que nada, de un ejercicio de razonabilidad [�][15] (negrillas fuera del texto)

79. As� las cosas, en el examen de procedibilidad de la medida solicitada, de conformidad con la jurisprudencia de esta Corporaci�n, deber� verificarse la concurrencia de los elementos tradicionales que ameritan la imposici�n de la cautela, a saber: (i)fumus boni iuris, o apariencia de buen derecho, (ii) periculum in mora, o perjuicio de la mora, y (iii) la ponderaci�n de intereses.

III.2. La medida cautelar consistente en la suspensi�n provisional de los efectos jur�dicos del acto administrativo acusado

80. En el marco de las diversas medidas cautelares, instauradas en el nuevo proceso contencioso administrativo[16], se encuentra la figura de la suspensi�n provisional de los efectos de los actos administrativos prevista en el art�culo 238 de la Constituci�n Pol�tica y desarrollada en los art�culos 231[17] y siguientes del CPACA.

81. Entre sus caracter�sticas principales se destaca su naturaleza cautelar, temporal y accesoria, tendiente a evitar que actos contrarios al ordenamiento jur�dico puedan continuar surtiendo efectos, mientras se decide de fondo su constitucionalidad o legalidad, en el proceso ordinario en el que se hubiere decretado tal medida. Por lo que su finalidad est� dirigida a �evitar, transitoriamente, que el acto administrativo surta efectos jur�dicos, en virtud de un juzgamiento provisorio del mismo, salvaguardando los intereses generales y el Estado de derecho�.[18]

82. En cuanto al decreto de este tipo de cautelas, el art�culo 231 del CPACA dispone lo siguiente:

[�] Cuando se pretenda la nulidad de un acto administrativo, la suspensi�n provisional de sus efectos proceder� por violaci�n de las disposiciones invocadas en la demanda o en la solicitud que se realice en escrito separado, cuando tal violaci�n surja del an�lisis del acto demandado y su confrontaci�n con las normas superiores invocadas como violadas o del estudio de las pruebas allegadas con la solicitud. Cuando adicionalmente se pretenda el restablecimiento del derecho y la indemnizaci�n de perjuicios deber� probarse al menos sumariamente la existencia de los mismos.

En los dem�s casos, las medidas cautelares ser�n procedentes cuando concurran los siguientes requisitos:

2. Que el demandante haya demostrado, as� fuere sumariamente, la titularidad del derecho o de los derechos invocados.

3. Que el demandante haya presentado los documentos, informaciones, argumentos y justificaciones que permitan concluir, mediante un juicio de ponderaci�n de intereses, que resultar�a m�s gravoso para el inter�s p�blico negar la medida cautelar que concederla.

b) Que existan serios motivos para considerar que de no otorgarse la medida los efectos de la sentencia ser�an nugatorios.[�](negrillas fuera del texto)

83. En lo concerniente al debido entendimiento de la norma en cita, en providencia de 26 de junio de 2020[19], esta Secci�n aclar� que cuando se trata de medidas cautelares de suspensi�n provisional de los efectos de un acto administrativo y se acredita prima facie que el acto acusado contraviene el ordenamiento jur�dico superior, de manera impl�cita se satisfacen los requisitos del perjuicio por la mora periculum in mora, y de apariencia de buen derecho fumus boni iuris; pues en un Estado Social de Derecho esos elementos siempre concurren cuando se trata de la efectiva transgresi�n del ordenamiento jur�dico por parte de las autoridades p�blicas.

84. En el asunto sub examine, la parte actora solicit� la suspensi�n provisional de los efectos jur�dicos de la Resoluci�n 0828 de 22 de mayo de 2018, tras considerar que ese acto administrativo transgrede las normas en que deber�a fundarse e incurre por nueve razones en los vicios de falsa motivaci�n y expedici�n irregular.

85. En primer lugar, indic� que la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda. no ejerce la posesi�n del bien inmueble en donde realizar� el proyecto autorizado, y propuso los reparos de falsa motivaci�n y desconocimiento del numeral 4� del art�culo 2.2.3.3.5.2. del Decreto 1076 de 2015.

86. En segundo lugar, aleg� que el proyecto colinda con viviendas, centros de comercio e instituciones educativas y, por eso, desconoce los art�culos 2�, 8�, 79 y 95 de la Constituci�n Pol�tica, los art�culos 3, 5 y 6 de la Ley 1751 de 2015, el art�culo 35 de la Resoluci�n 5194 de 2010[20], los art�culos 2.2.5.1.2.1, 2.2.5.1.2.2., 2.2.3.3.5.3. y 2.2.5.1.7.2. del Decreto 1076 de 2015, los numerales 3 y 4.2.1. de la Resoluci�n 01164 de 2002, el art�culo 75 de la Resoluci�n 909 de 2008[21], el numeral 3.5.1. de la Resoluci�n 2153 de 2010[22], e incurre en los vicios de falsa motivaci�n y expedici�n irregular.

87. En tercer lugar, advirti� que la evaluaci�n del permiso de emisiones atmosf�ricas presenta deficiencias t�cnicas en cuanto a la altura de la chimenea y al estudio de direcci�n de los vientos, de manera que el acto incurre en falsa motivaci�n, expedici�n irregular y transgresi�n de los numerales 4.3., 4.4. y 4.4. de la Resoluci�n 2153 de 2010.

88. En cuarto lugar, plante� que los impactos al recurso h�drico generados por el proyecto no fueron calculados y, en consecuencia, afirm� que son falsos los motivos que soportan el acto acusado y que la decisi�n cuestionada transgrede lo ordenado por el numeral 5� del art�culo 2.2.3.3.5.3. del Decreto 1076 de 2015.

89. En quinto lugar, afirm� que el proyecto est� ubicado en una zona inestable y puede afectar �reas protegidas y el recurso h�drico, desconociendo con ello los art�culos 2�, 8�, 29, 79 y 95 de la Constituci�n Pol�tica y el art�culo 162 de la Ley 9 de 1979.

90. En sexto lugar, mencion� que el proyecto est� ubicado en un lugar no autorizado por el POT de Pereira, transgrediendo los l�mites previstos en el art�culo 35 de la Resoluci�n 5194 de 2010.

91. En s�ptimo lugar, anot� que la actividad autorizada produce olores ofensivos en zonas residenciales, lo que transgrede el art�culo 2.2.5.1.3.4. del Decreto 1076 de 2015 y el art�culo 5� de la Resoluci�n 1541 de 2013.

92. En octavo lugar, sugiri� que el caso deb�a resolverse a la luz del principio de precauci�n, seg�n lo dispuesto en los art�culos 1� (numerales 6 y 11) y 31 de la Ley 99.

93. Finalmente, aleg� que el proyecto autorizado generar�a residuos peligrosos que pueden afectar la salud seg�n lo se�alado en los numerales 3 y 4.2.1. de la Resoluci�n 01164 de 2002.

94. En este contexto, cabe poner de presente que la Resoluci�n 0828 de 2018 -objeto de acusaci�n- resolvi� lo siguiente:

[�] ARTICULO PRIMERO: Otorgar permiso de vertimientos de las aguas residuales dom�sticas, en un caudal de 0.08229 ls, con destino al suelo en las coordenadas (...), A favor de la sociedad SERKOFUN LOS OLIVOS LTDA (...) En calidad de poseedor y promitente comprador del predio denominado (...), para el proyecto parque cementerio SERKOFUN LOS OLIVOS LTDA, de conformidad con lo establecido en el concepto t�cnico (�). los cuales hacen parte integral del presente acto administrativo, as�:

ARTICULO SEGUNDO: Otorgar permiso de vertimientos de las aguas residuales no dom�sticas, en un caudal de 0.69229 ls, con destino al suelo en las coordenadas (...), A favor de la sociedad SERKOFUN LOS OLIVOS LTDA (...) En calidad de poseedor y promitente comprador del predio denominado (...), Para el proyecto parque cementerio SERKOFUN LOS OLIVOS LTDA, de conformidad con lo establecido en el concepto t�cnico (�) los cuales hacen parte integral del presente acto administrativo as�:

ARTICULO TERCERO: Los Permisos de Vertimiento de Aguas Residuales Dom�sticas y NO Dom�sticas otorgados mediante el presente Acto tendr�n una vigencia de cinco (5) a�os (�)

ART�CULO CUARTO: La sociedad SERKOFUN LOS OLIVOS LTDA (�) como beneficiario del Permiso de Vertimiento de Aguas Residuales Dom�sticas y NO Domesticas (�) queda sujeta al cumplimiento de las siguientes obligaciones de car�cter t�cnico � ambiental: (�)

ART�CULO QUINTO: Aprobar la Demarcaci�n de Suelos de protecci�n, sobre la Quebrada Andahuaylas -. Pe�itas, en un Ancho de la Franja delimitada de 97m y una longitud de la franja delimitada de 80m par� un �rea total delimitada de 8.730 m2, para el predio (�)

Art�culo S�PTIMO: Que conforme a lo dispuesto por la Ley 1579 de 2012; y la Resoluci�n n�mero 6264 del 14 de junio de 2016, (�) la afectaci�n consiste en: C�digo 03 - Limitaciones y Afectaciones (car�cter ambiental, art�culo 67 Decreto Ley 2811 de 1974).

ARTICULO OCTAVO: Otorgar a la sociedad SERKOFUN LOS OLIVOS LTDA (�) permiso de Emisiones Atmosf�ricas para un (1) equipo Horno Crematorio marca StS, para el proyecto parque cementerio SERKOFUN LOS OLIVOS LTDA, de conformidad con lo establecido en el concepto t�cnico n�mero 00207 del 5 de febrero de 2018, aclarado por el concepto t�cnico n�mero 00800 21 del 20 de marzo 2018 y a su vez modificado por el concepto t�cnico n�mero 001468 del 10 de mayo 2018 los cuales hacen parte integral del presente acto administrativo as�:

ART�CULO NOVENO: La sociedad SERKOFUN LOS OLIVOS LTDA (�) como beneficiaria del permiso de Emisiones Atmosf�ricas (�) queda sujeta al cumplimiento de las siguientes obligaciones de car�cter t�cnico � ambiental: (�)

ART�CULO DECIMO: La sociedad SERCOFUN LOS OLIVOS LTOA, (�) en calidad de beneficiaria de la Aprobaci�n de Demarcaci�n de Suelos de protecci�n y el permiso de Emisiones Atmosf�ricas (�) deber� acatar las siguientes obligaciones (�):

ARTICULO D�CIMO PRIMERO: Aprobar el plan de gesti�n integral de residuos (�), a favor de la sociedad SERCOFUN LOS OLIVOS LTDA, de conformidad con lo establecido en el concepto t�cnico n�mero 00207 del 5 de febrero de 2018, aclarado por el concepto t�cnico n�mero 00800 21 del 20 de marzo 2018 y a su vez modificado por el concepto t�cnico n�mero 001468 del 10 de mayo 2018 los cuales hacen parte integral del presente acto administrativo as�: [�]

95. As� las cosas, con el fin de abordar preliminarmente el problema jur�dico planteado, la Sala examinar� los reparos en funci�n de los apartes f�cticos que les son comunes, tal y como se observa a continuaci�n:

III.4.1. Del primer reparo relacionado con la propiedad y posesi�n del bien inmueble en donde Sercofun Los Olivos Ltda. pretende realizar el proyecto autorizado

96. En su primer reparo, la parte demandante afirm� que la Resoluci�n 0828 transgrede el numeral 4� del art�culo 2.2.3.3.5.2. del Decreto 1076 de 2015, porque Sercofun Los Olivos Ltda. no cuenta con la propiedad, posesi�n o mera tenencia del inmueble en donde se desarrollar� el proyecto y, aun as�, la CARDER le reconoci� tal calidad cuando aprob� su permiso de vertimientos.

97. En segundo lugar, y por las mismas razones, adujo que son falsos los motivos que sustentan la decisi�n administrativa relacionada con la demarcaci�n de los suelos de protecci�n.

98. Para resolver el primer punto, se trae a colaci�n el contenido del numeral cuarto del art�culo 2.2.3.3.5.2. del Decreto 1076 de 2015, norma que se�ala:

[�] ART�CULO 2.2.3.3.5.2. Requisitos del permiso de vertimientos. El interesado en obtener un permiso de vertimiento, deber� presentar ante la autoridad ambiental competente, una solicitud por escrito que contenga la siguiente informaci�n:

[�].4. Autorizaci�n del propietario o poseedor cuando el solicitante sea mero tenedor. [�]� [Resalta el Despacho]

99. Como se observa, quien pretenda obtener un permiso de vertimientos debe contar con la respectiva autorizaci�n del propietario o poseedor[23]. Sin embargo, lo cierto es que, a diferencia del planteamiento efectuado por la parte actora, el cumplimiento de esta obligaci�n se encuentra, prima facie, acreditado en el plenario.

100. En efecto, el Despacho observa que la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda. suscribi� un contrato de promesa de compraventa con los se�ores Jes�s Maurier Valencia Hern�ndez y Sarita Valencia Henao, en su calidad de propietarios del inmueble cuestionado. El art�culo 7� de ese contrato autoriz� a la sociedad solicitante para que, a nombre de los propietarios, tramitar� �ante la Curadur�a y los dem�s organismos, las licencias y/o permisos pertinentes del proyecto a desarrollar en el inmueble (�) desde ahora se comprometen a hacer cesi�n de estas licencias a favor de la entidad COMPRADORA�. Adem�s, como uno de anexos del contrato se enlist� el �poder para tr�mite de licencias otorgado por el prominente vendedor�[24].

101. Aunado a ello, Sercofun Los Olivos Ltda. alleg� una declaraci�n juramentada del propietario del predio, se�or Jes�s Maurier Valencia Hern�ndez, en la que manifest� que �ten�a conocimiento de que los permisos ambientales requeridos para el proyecto a desarrollar en el inmueble objeto de promesa de compraventa (�) ser�an tramitados a nombre del promitente comprador�[25].

102. As� las cosas, del an�lisis preliminar de la controversia, no es posible afirmar que la CARDER desconociera el numeral 4� del art�culo 2.2.3.3.5.2. del Decreto 1076 de 2015, en vista de que los propietarios del inmueble objeto de estudio autorizaron a Sercofun Los Olivos Ltda. para que solicitara los permisos de Vertimientos de Aguas Residuales Dom�sticas y No Dom�sticas.

103. Ahora bien, respecto del segundo planteamiento relacionado con la falsa motivaci�n del acto en cuanto a la calidad de poseedor reconocida al titular de los permisos en la demarcaci�n de Suelos de Protecci�n, es necesario mencionar que el art�culo 5� del acto acusado, dispuso lo siguiente:

[�] ARTICULO QUINTO: Aprobar la Demarcaci�n de Suelos de Protecci�n, sobre la Quebrada Andahuaylas � Pe�itas, en un Ancho de la Franja delimitada de 97 m y una longitud de la franja delimitada de 90 m para un �rea total delimitada de 8.730 m2, para el predio denominado SIN DIRECCI�N, identificado con matr�cula inmobiliaria No. 290-86727, ubicado en la vereda Condina en jurisdicci�n del municipio de Pereira � Risaral, en las coordenadas X: 1016252 y Y: 1157205, del cual es poseedor y prometiente comprador la sociedad SERCOFUN LOS OLIVOS LTDA [�]. (Negrillas del Despacho)

104. Sin embargo, antes de abordar esa acusaci�n, el Despacho considera pertinente establecer si los apartes acusados del art�culo 5� de la Resoluci�n 0828 est�n o no produciendo efectos jur�dicos.

105. Con dicho prop�sito, es necesario resaltar que la Corporaci�n Aut�noma Regional del Risaralda - CARDER, a trav�s de la Resoluci�n 1628 del 28 de agosto de 2018[26], modific� parcialmente su decisi�n inicial a este respecto, en el siguiente sentido:

[�] ART�CULO PRIMERO. Modificar Parcialmente la Resoluci�n n�mero 0828 del 22 de Mayo de 2018 (�) de conformidad con lo establecido en el presente prove�do.

ART�CULO SEGUNDO: En consecuencia de la anterior declaraci�n, se modifica el ART�CULO QUINTO de la resoluci�n CARDER No. 0828 del 22 de Mayo del 2018, en el (sic) quedar� de la siguiente forma:

"ARTICULO QUINTO: Aprobar la Demarcaci�n de Suelos de Protecci�n, sobre la Quebrada Andahuaylas � Pe�itas, en un Ancho de la Franja delimitada de 97 m y una longitud de la franja delimitada de 90 m para un �rea total delimitada de 8.730 m2, para el predio denominado SIN DIRECCI�N, identificado con matr�cula inmobiliaria No. 290-86727, ubicado en la vereda Condina en jurisdicci�n del municipio de Pereira � Risaral, en las coordenadas X: 1016252 y Y: 1157205, de copropiedad de los se�ores JESUS MAURIER VALENCIA HERN�NDEZ, identificado con c�dula de ciudadan�a No. 10.074.409 y SARITA VALENCIA HENAO, identificada con c�dula de ciudadan�a No. 1088.266.980, de conformidad con lo establecido en el Concepto T�cnico n�mero 00207 del 05 de Febrero de 2018, aclarada por el Concepto T�cnico No. 00821 del 20 de marzo del 2018 y a su vez modificado por el Concepto T�cnico No. 001468 del 10 de mayo del 2018, los cuales hacen parte integral del presente Acto Administrativo, as�:

[�] ARTICULO TERCERO: Se debe dar estricto cumplimiento a las obligaciones, cobros por Concepto de Seguimiento y recomendaciones contenidas en la Resoluci�n CARDER n�mero 0828 del 22 de Mayo de 2018.

ART�CULO CUARTO: La modificaci�n que mediante la presente Resoluci�n se otorga, se encuentra condicionada a la Vigencia establecida en la Resoluci�n CARDER n�mero 0828 del 22 de Mayo de 2018. [�]

106. Cabe mencionar que la parte considerativa de la Resoluci�n 1628 expone las razones que sustentaron esa decisi�n, las cuales son del siguiente tenor:

[�] De conformidad con las normas establecidas anteriormente, la evaluaci�n de la informaci�n allegada en el curso del tr�mite y el an�lisis realizado por parte de este componente jur�dico, se determin� que efectivamente la Corporaci�n incurri� en un error al aprobar la Demarcaci�n de Suelos de Protecci�n a nombre del prometiente comprador del predio, pues es claro que los permisos y las obligaciones derivadas de dicha delimitaci�n se le adjudican al propietario del predio, en el caso que nos ata�e, la autorizaci�n se aprob� a nombre de la sociedad SERCOFUN LOS OLIVOS LTDA, la cual anexo una promesa de compraventa del predio para realizar la ejecuci�n del proyecto y obtener los permisos ambientales, siendo copropietarios los se�ores JES�S MAURIER VALENCIA HERNANDES y SARITA VALENCIA HENAO, (�) es as� como se considera necesario realizar la modificaci�n del Acto Administrativo, en el sentido de aclarar que el permiso de Demarcaci�n de Suelos de protecci�n fue aprobada a nombre de los se�ores JES�S MAURIER VALENCIA y SARITA VALENCIA HENAO, siendo estos quienes a�n configuran como propietarios del predio en el folios de matr�cula inmobiliaria que reposa en el expediente 5944. [�]

107. Como puede observarse, el art�culo 5� de la Resoluci�n 0828, en su texto original, ya no est� produciendo efectos jur�dicos porque oper� el fen�meno de perdida de ejecutoria del acto administrativo, regulado por el art�culo 91 (numeral 5) del CPACA[27].

108. En ese orden, el estudio de la medida cautelar resulta improcedente respecto del cargo de falsa motivaci�n de la demarcaci�n del suelo de protecci�n, pues el objeto de la suspensi�n provisional es enervar la eficacia del acto acusado mientras se expide la providencia que pone fin al proceso, lo cual ya aconteci� por la perdida de la fuerza ejecutoria.

109. En un asunto de naturaleza similar, la Secci�n Primera del Consejo de Estado explic� lo siguiente:

[�] 1.3. La suspensi�n provisional, adem�s, es una medida cautelar que apunta a enervar la eficacia, los efectos, del acto administrativo, como se colige no solo de la doctrina y la jurisprudencia, sino tambi�n del art�culo 91.1 de la Ley 1437 de 2011.

Esa misma disposici�n, se expresa, igualmente, que hay p�rdida de la fuerza ejecutoria cuando el acto administrativo �pierde vigencia� � art�culo 91.5-, lo que ocurre cuando se presenta el fen�meno de derogaci�n de la norma, entendido como �el acto de proceder, mediante disposici�n posterior, a dejar sin efecto, en todo o en parte, un precepto jur�dico precedente�[28].

2. Es decir, que la suspensi�n provisional de los efectos de un acto administrativo no es procedente cuando la norma acusada ha sido modificada o derogada, por cuanto dicha suspensi�n parte del supuesto de vigencia.[�]�[29] (subraya y negrilla fuera del texto)

110. Siendo ello as�, la Sala unitaria insiste en que los reparos jur�dicos del cargo de falsa motivaci�n est�n ligados a la condici�n de poseedor de la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda., circunstancia que fue derogada t�citamente por la Resoluci�n 1628 del 28 de agosto de 2018.

111. Consecuentemente, el Despacho guardar� silencio frente a dicho reparo y negar� la solicitud de suspensi�n provisional, sin perjuicio del control de legalidad que debe realizar en atenci�n a los efectos que produjo la norma mientras estuvo vigente.

III.4.2. De los reparos (segundo y tercero) relacionados con la evaluaci�n del permiso de emisiones atmosf�ricas

112. La parte actora afirma que el horno crematorio autorizado colinda con viviendas, centros de comercio e instituciones educativas y, por eso, afectar� los derechos a la salud y al goce de un ambiente sano de esa poblaci�n; adem�s, transgrede los art�culos 2�, 8�, 79 y 95 de la Constituci�n Pol�tica, los art�culos 3, 5 y 6 de la Ley 1751 de 2015, los art�culos 2.2.5.1.2.1, 2.2.5.1.2.2., 2.2.3.3.5.3. y 2.2.5.1.7.2. del Decreto 1076 de 2015, el art�culo 75 de la Resoluci�n 909 de 2008, el numeral 3.5.1. de la Resoluci�n 2153 de 2010, e incurre en los vicios de falsa motivaci�n y expedici�n irregular.

113. Tambi�n se�ala que la evaluaci�n del permiso de emisiones atmosf�ricas presenta deficiencias t�cnicas en cuanto a la altura de la chimenea y al estudio de direcci�n de los vientos, desconociendo con ello los numerales 4.3., 4.4. y 4.4. de la Resoluci�n 2153 de 2010.

114. En este contexto, para resolver los cargos antes expuestos, el Despacho considera pertinente referirse: (i) al marco normativo sobre emisiones atmosf�ricas de los hornos crematorios para incineraci�n de exhumaciones y cad�veres de humanos, y (ii) a los asuntos acreditados en el proceso sobre el particular.

III.4.2.1. El marco normativo de las emisiones atmosf�ricas de los hornos crematorios para incineraci�n de exhumaciones y cad�veres de humanos

115. Existe una relaci�n indivisible entre la calidad del aire, la salud p�blica y la preservaci�n, conservaci�n y salvaguarda del entorno natural. La contaminaci�n del aire constituye un factor de deterioro de los ecosistemas y representa un importante riesgo para la salud[30]. Por ello, los art�culos 2�, 8�, 79 y 95 de la Constituci�n Pol�tica reconocen el deber, el derecho y el inter�s colectivo a gozar de un ambiente sano[31]. Igualmente, las citadas normas disponen que al Estado le asiste la obligaci�n de proteger la diversidad, prevenir y controlar los factores de deterioro ambiental y exigir la reparaci�n de los da�os causados a la naturaleza.

116. Como los niveles cr�ticos de contaminaci�n del aire tienen la potencialidad de afectar el derecho a la salud -a que se refiere el art�culo 49 de la Constituci�n Pol�tica y los art�culos 3, 5 y 6 de la Ley 1751 de 2015-, el Estado es responsable de proteger, garantizar y establecer mecanismos para procurar el goce efectivo de esa garant�a.

117. El C�digo Nacional de Recursos Naturales Renovables y de Protecci�n al Medio Ambiente, en su art�culo 73, indica que: �corresponde al Gobierno mantener la atm�sfera en condiciones que no causen molestias o da�os, o interfieran el desarrollo normal de la vida humana, animal o vegetal y de los recursos naturales renovables�. Y agrega en su art�culo 74 que: �se prohibir�, restringir� o condicionar� la descarga, en la atm�sfera de polvo, vapores, gases, humos, emanaciones y, en general, de sustancias de cualquier naturaleza que puedan causar enfermedad, da�o o molestias a la comunidad o a sus integrantes, cuando sobrepasen los grados o niveles fijados�.

118. Concretamente, el permiso de emisi�n atmosf�rica es la autorizaci�n que concede la autoridad ambiental competente, mediante acto administrativo, para que una persona natural o jur�dica, p�blica o privada, pueda realizar emisiones al aire dentro de los l�mites permisibles establecidos en las normas ambientales. Es obligatorio obtener dicha autorizaci�n cuando se dan los supuestos de hecho previstos en la reglamentaci�n. Adicionalmente, el permiso s�lo se otorga al propietario de la obra, empresa, actividad, industria o establecimiento que origina las emisiones (arts. 2.2.5.1.7.1. y 2.2.5.1.7.9 del Decreto 1076 de 2015).

119. Seg�n lo dispuesto en el art�culo 2.2.5.1.7.2. del Decreto 1076, las siguientes actividades deben obtener la aludida autorizaci�n:

[�] ART�CULO 2.2.5.1.7.2. Casos que requieren permiso de emisi�n atmosf�rica. Requerir� permiso previo de emisi�n atmosf�rica la realizaci�n de alguna de las siguientes actividades, obras o servicios, p�blicos o privados:

b) Descargas de humos, gases, vapores, polvos o part�culas por ductos o chimeneas de establecimientos industriales, comerciales o de servicio; (�)

f) Operaci�n de calderas o incineradores por un establecimiento industrial o comercial; (�)

h) Procesos o actividades susceptibles de producir emisiones de sustancias t�xicas; (�)

PAR�GRAFO 1. En los casos previstos en los literales a), b), d), f) y m) de este art�culo, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible establecer� los factores a partir de los cuales se requerir� permiso previo de emisi�n atmosf�rica, teniendo en cuenta criterios tales como, los valores m�nimos de consumo de combustibles, los vol�menes de producci�n, el tipo y volumen de las materias primas consumidas, el tama�o y la capacidad instalada, el riesgo para la salud humana y el riesgo ambiental inherente, la ubicaci�n, la vulnerabilidad del �rea afectada, el valor del proyecto obra o actividad, el consumo de los recursos naturales y de energ�a y el tipo y peligrosidad de residuos generados, seg�n sea el caso. [�]

120. El art�culo 2.2.5.1.7.4. del Decreto 1076 regula el contenido de esa solicitud de permiso, enunciando, entre otros, los siguientes requisitos relacionados con el caso concreto:

[�] ART�CULO 2.2.5.1.7.4. Solicitud del permiso. La solicitud del permiso de emisi�n debe incluir la siguiente informaci�n: (�)

e) Informaci�n meteorol�gica b�sica del �rea afectada por las emisiones;

f) Descripci�n de las obras, procesos y actividades de producci�n, mantenimiento, tratamiento, almacenamiento o disposici�n, que generen las emisiones y los planos que dichas descripciones requieran, flujograma con indicaci�n y caracterizaci�n de los puntos de emisi�n al aire, ubicaci�n y cantidad de los puntos de descarga al aire, descripci�n y planos de los ductos, chimeneas, o fuentes dispersas, e indicaci�n de sus materiales, medidas y caracter�sticas t�cnicas;

g) Informaci�n t�cnica sobre producci�n prevista o actual, proyectos de expansi�n y proyecciones de producci�n a cinco (5) a�os;

h) Estudio t�cnico de evaluaci�n de las emisiones de sus procesos de combusti�n o producci�n, se deber� anexar adem�s informaci�n sobre consumo de materias primas combustibles u otros materiales utilizados. (Modificado por el Decreto 2107 de 1995, art 4o) (�)

j) Si utiliza controles al final del proceso para el control de emisiones atmosf�ricas, o tecnolog�as limpias, o ambos;

(...) PAR�GRAFO 4.No se podr�n exigir al solicitante sino aquellos requisitos e informaciones que sean pertinentes, atendiendo a la naturaleza de la actividad u obra para la cual se solicita el permiso, al lugar donde se desarrolle o a la comunidad a la que afecte. Cuando la autoridad ambiental competente posea la informaci�n requerida para la solicitud del otorgamiento o de renovaci�n del permiso de emisi�n, seg�n el caso, no la exigir� como requisito al solicitante.

121. El art�culo 2.2.5.1.7.5. del Decreto 1076 se�ala cu�l es el procedimiento y los tiempos de la evaluaci�n del premiso de emisi�n. Esta norma, en su par�grafo segundo, indica que: �la informaci�n presentada por el solicitante deber� ser veraz y fidedigna y es su deber afirmar que as� lo hace, bajo la gravedad del juramento�.

122. Adem�s, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, a trav�s de la Resoluci�n 909 de 2008, estableci� las normas y est�ndares de emisi�n admisibles de contaminantes a la atm�sfera por fuentes fijas. El cap�tulo XIV de la Resoluci�n 909 regul� los par�metros de contaminantes al aire autorizados para hornos crematorios para incineraci�n de exhumaciones y cad�veres de humanos, as�:

[�] ART�CULO 62. TEMPERATURAS DE OPERACI�N. Los hornos crematorios deben mantener una temperatura de operaci�n mayor o igual a 750 oC en la c�mara de combusti�n y mayor o igual a 900 oC en la c�mara de poscombusti�n.

ART�CULO 63. TIEMPO DE RETENCI�N. El tiempo de retenci�n en la c�mara de poscombusti�n de los hornos crematorios debe ser superior a dos (2) segundos.

ART�CULO 64. EST�NDARES DE EMISI�N ADMISIBLES DE CONTAMINANTES AL AIRE EN HORNOS CREMATORIOS. En la Tabla 34 se establecen los est�ndares de emisi�n admisibles de contaminantes al aire para hornos crematorios a condiciones de referencia con ox�geno de referencia al 11%.

Est�ndares de emisi�n admisibles de contaminantes al aire para hornos crematorios a condiciones de referencia (25 oC, 760 mm Hg) con ox�geno de referencia al 11%

ART�CULO 65. EST�NDARES DE EMISI�N ADMISIBLES DE BENZOPIRENO Y DIBENZO ANTRACENO PARA HORNOS CREMATORIOS. Los hornos crematorios deben cumplir un l�mite de emisi�n admisible de 100 �g/m3 para Benzopireno y Dibenzo antraceno a condiciones de referencia (25 oC, 760 mm Hg) con ox�geno de referencia del 11%.

ART�CULO 66. TEMPERATURA DE SALIDA DE LOS GASES. Todos los hornos crematorios deben contar con un sistema que registre de forma autom�tica la temperatura de salida de los gases; esta temperatura debe ser inferior a 250 oC. Si el registro de dicha temperatura est� por encima de este valor se debe instalar un sistema de enfriamiento que reduzca la temperatura como m�ximo hasta 250oC. [�]

123. En cuanto a la determinaci�n del punto de descarga de la emisi�n por fuentes fijas, el art�culo 69 de la Resoluci�n 909 indica que: �toda actividad que realice descargas de contaminantes a la atm�sfera debe contar con un ducto o chimenea cuya altura y ubicaci�n favorezca la dispersi�n de estos al aire, cumpliendo con los est�ndares de emisi�n que le son aplicables�.

124. El art�culo 70 de la Resoluci�n ibidem se�ala que: �La altura del punto de descarga (chimenea o ducto) se determinar� con base en la altura o el ancho proyectado de las estructuras cercanas, entre otros criterios, siguiendo las Buenas Pr�cticas de Ingenier�a tanto para instalaciones existentes como nuevas, establecidas en el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas�. Y agreg� que: �en todo caso, la altura m�nima debe garantizar la dispersi�n de los contaminantes�.

125. En cuanto a los m�todos, a las estructuras de medici�n y al Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas, la misma norma precisa que:

[�] ART�CULO 71. LOCALIZACI�N DEL SITIO DE MUESTREO. Todas las actividades industriales, los equipos de combusti�n externa, las actividades de incineraci�n de residuos y los hornos crematorios que realicen descargas de contaminantes a la atm�sfera deben contar con un sistema de extracci�n localizada, chimenea, plataforma y puertos de muestreo que permitan realizar la medici�n directa y demostrar el cumplimiento normativo.

La altura de la chimenea, di�metro y localizaci�n de los puertos de muestreo deben construirse de acuerdo a los m�todos y procedimientos adoptados en el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas. En todo caso, aquellas actividades, en las cuales la ubicaci�n del punto de descarga, debido a las condiciones f�sicas de la fuente (inclinaci�n, �rea superficial de la fuente, seguridad de acceso) imposibiliten la medici�n directa, podr�n estimar sus emisiones a trav�s de balance de masas o finalmente por medio de la utilizaci�n de factores de emisi�n de la Agencia de Protecci�n Ambiental de los Estados Unidos (EPA), de acuerdo con lo establecido en el art�culo 110 del Decreto 948 de 1995.

ART�CULO 72. M�todos de medici�n de referencia para fuentes fijas. El Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial adoptar� a nivel nacional el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas. Dicho protocolo contendr� los m�todos de medici�n de referencia para fuentes fijas, los procedimientos de evaluaci�n de emisiones, la realizaci�n de estudios de emisiones atmosf�ricas y vigilancia y control de la contaminaci�n atmosf�rica por fuentes fijas.

Las mediciones de las emisiones atmosf�ricas deben estar de acuerdo con lo establecido en el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas.

ART�CULO 73. M�todos alternativos para realizar la medici�n en ductos y chimeneas. Cuando no sea posible realizar el estudio de emisi�n por cualquiera de los m�todos de referencia establecidos en el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas, o cuando se facilite la aplicaci�n de un m�todo alternativo, la industria podr� solicitar a la autoridad ambiental competente la autorizaci�n para el empleo de un m�todo alternativo de acuerdo a lo establecido en dicho protocolo.

Art�culo 75. Medici�n continua de las emisiones. El Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas, debe determinar las condiciones a partir de las cuales las autoridades ambientales competentes podr�n exigir mediciones continuas de emisiones contaminantes. Las condiciones deben incluir por lo menos la carga de los contaminantes emitidos, la cercan�a con el est�ndar de emisi�n admisible de los contaminantes y la distancia entre la fuente y las poblaciones cercanas.

Par�grafo. Para la definici�n de poblaciones cercanas, se debe aplicar lo establecido en el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas referente a estructuras cercanas.

ART�CULO 77. Realizaci�n de estudios mediante medici�n de emisiones. Los estudios de emisiones realizados para establecer el cumplimiento de los est�ndares de emisi�n admisibles de contaminantes al aire deben cumplir con lo establecido en el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas. [�]

126. Las citadas disposiciones claramente reconocen que el estudio t�cnico de evaluaci�n de las emisiones -que presenta el peticionario junto con el permiso de emisiones atmosf�ricas- debe cumplir con lo establecido en el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas en cuanto a las caracter�sticas del sistema, los m�todos de medici�n y los procedimientos de evaluaci�n de emisiones.

127. Sin embargo, lo cierto es que: �cuando no sea posible realizar el estudio de emisi�n por cualquiera de los m�todos de referencia establecidos en el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas, o cuando se facilite la aplicaci�n de un m�todo alternativo, la industria podr� solicitar a la autoridad ambiental competente la autorizaci�n para el empleo de un m�todo alternativo de acuerdo a lo establecido en dicho protocolo�.

128. Siendo ello as�, es necesario poner de presente que el anterior protocolo fue adoptado mediante Resoluci�n 760 de 2010[32] y modificado por las Resoluciones 2153 de 2010, 591 de 2012, 1632 de 2012, 1807 de 2012, 1377 de 2015 y 2267 de 2018.

129. El cap�tulo 2 del protocolo �establece las consideraciones que se deben tener en cuenta para la elaboraci�n de los estudios de emisiones atmosf�ricas�. El cap�tulo 3 regula el monitoreo de emisiones atmosf�ricas, en materia de: i) frecuencia de los estudios de evaluaci�n de emisiones atmosf�ricas; ii) instalaciones nuevas; iii) equipos de respaldo; iv) Dioxinas y Furanos; v) tama�o de la muestra cuando existen fuentes de emisi�n similares operando bajo las mismas condiciones, y vi) Monitoreo Continuo de Emisiones

130. En lo concerniente a las �condiciones para la solicitud de monitoreo continuo de emisiones� y a las directrices de seguimiento, los ac�pites 3.5.1 y 3.5.2 del mencionado protocolo disponen lo siguiente:

[�]3.5.1 Condiciones para la solicitud de monitoreo continuo de emisiones

(�) Dentro de las condiciones m�nimas que deben ser tenidas en cuenta para la instalaci�n de un sistema de monitoreo continuo de emisiones se incluyen la cercan�a de las concentraciones de los contaminantes emitidos por la fuente con los est�ndares m�ximos de emisi�n admisibles, los datos obtenidos de estudios de calidad del aire realizados en la zona donde se encuentra ubicada la fuente, las caracter�sticas de peligrosidad de los contaminantes emitidos y las poblaciones o grupos cercanos a la fuente.

Por otra parte, es necesario realizar un an�lisis de la naturaleza de la actividad que se desarrolla y de los riesgos que esta representa para el medio ambiente y para la salud de las personas. (�)

(�) En todos los casos en los que se instale un sistema de monitoreo continuo de emisiones, este deber� reportar los datos de concentraci�n de contaminantes con la correspondiente correcci�n a condiciones de referencia y ox�geno de referencia, de acuerdo con lo establecido para cada actividad en la Resoluci�n 909 del 5 de junio de 2008 o la que la adicione, modifique o sustituya. .

(�) Todas las actividades a las cuales les corresponda realizar monitoreo continuo de emisiones, deber�n enviar a la autoridad ambiental competente cada seis (6) meses un informe que cumpla con las condiciones establecidas por el presente protocolo y que contenga el an�lisis, promedio diarios y horarios y los datos registrados por los equipos de monitoreo continuo durante este mismo periodo de tiempo. (�)

131. El cap�tulo 4 se�ala las Buenas Pr�cticas de Ingenier�a que se utilizaran para determinar la altura de la chimenea. La referida metodolog�a �obedece al an�lisis de diferentes variables que involucran las condiciones del entorno de la fuente de emisi�n. Dentro de estas condiciones se incluyen las dimensiones de la estructura en la cual se encuentra la fuente de emisi�n y de las estructuras cercanas, la direcci�n predominante del viento en la zona y la influencia que pueden tener las estructuras cercanas en la dispersi�n de los contaminantes emitidos por la fuente�.

132. Y el ac�pite 4.1 se�ala que: �para la aplicaci�n de Buenas Pr�cticas de Ingenier�a se debe considerar inicialmente si la instalaci�n es nueva o existente (�) con el fin de determinar la ecuaci�n que se debe aplicar�. El apartado 4.3 define la ecuaci�n del ducto bajo las siguientes variables t�cnicas:

Para el caso de procesos o instalaciones nuevas, la determinaci�n de la altura mediante la aplicaci�n de Buenas Pr�cticas de Ingenier�a involucra variables adicionales como la presencia de estructuras cercanas, las dimensiones de dichas estructuras y la direcci�n predominante del viento.

Para la determinaci�n de la altura del ducto se debe aplicar la siguiente ecuaci�n:

HT: Altura de la chimenea medida desde el nivel del terreno en la base de la chimenea hasta el borde superior de la misma (Ver Figura 2)

Hec: Altura de la estructura cercana a la fuente de la emisi�n, medida desde el nivel del suelo en la base de la chimenea. (Ver Figura 11)

L: Corresponde a la menor de las dimensiones entre el ancho proyectado en la direcci�n predominante del viento y la altura de la estructura cercana. (Ver Figura 9, Figura 10 y Figura 11)

Inicialmente se debe determinar la regi�n cercana a la fuente de emisi�n, la cual se define como la regi�n que se obtiene al medir una distancia de 800 metros en todas las direcciones desde el borde de la estructura en la cual se encuentra la fuente de emisi�n (Ver Figura 5)

Posteriormente se deben determinar las estructuras cercanas, las cuales se definen como aquellas estructuras que se encuentran ubicadas dentro de la regi�n cercana, sin embargo para dicha determinaci�n se debe tener en cuenta lo siguiente:

� Se deben considerar �nicamente aquellas estructuras que se interponen entre la direcci�n predominante del viento y la fuente de emisi�n (Ver Figura 10)

� En los casos en los que exista m�s de una estructura que se interponga entre la direcci�n del viento y la fuente de emisi�n se debe realizar el c�lculo con cada una de ellas y definir como estructura cercana la que d� como resultado la mayor de las alturas de la chimenea.

� Cuando la zona en la cual se encuentra ubicada la fuente de emisi�n no cuente con una direcci�n predominante del viento, se debe realizar el c�lculo de la altura de la chimenea para cada una de las estructuras cercanas y tomar la que d� como resultado una mayor altura para la chimenea.

(�) Una vez identificadas las estructuras cercanas, es decir, aquellas que se encuentran dentro de la regi�n cercana de la fuente de emisi�n, se debe identificar el �rea de influencia de cada una de ellas con el objetivo de establecer si afectan o no la dispersi�n de los contaminantes emitidos por la fuente fija. Para determinar el �rea de influencia de las estructuras cercanas se debe medir una distancia correspondiente a 5 veces la menor de las dimensiones entre el alto y el ancho proyectado (Ver Figura 7) de cada una de las estructuras, en todas las direcciones, medida desde el borde de cada estructura. En este sentido, en la Figura 6 se muestra la manera como se debe calcular la regi�n cercana para tres estructuras, dos de ellas (la n�mero 1 y n�mero 3) utilizando el valor de su altura por ser el menor y la n�mero 2 utilizando el valor del ancho proyectado por la misma raz�n. Posteriormente se muestra el an�lisis de datos de los 3 casos. [�]

133. Para determinar el �rea de influencia de las estructuras altas (como es el caso de estudio), el protocolo indica lo siguiente:

Son estructuras altas aquellas en las cuales su altura es superior al ancho, por lo que en este tipo de estructuras el valor de la variable L estar� dado por el valor del ancho proyectado.

En la Figura 7 se ilustra la determinaci�n del �rea de influencia para una estructura alta.

Entonces la extensi�n de la regi�n cercana estar� dada por el valor del ancho, es decir 5 * 5 = 25 m

De acuerdo con lo mostrado en la Figura 7, el �rea de influencia de las estructuras se extiende una distancia equivalente a 5 veces el valor del ancho proyectado en todas las direcciones.[�]

134. Finalmente, el ac�pite de �consideraciones adicionales para la aplicaci�n de Buenas Pr�cticas de Ingenier�a (BPI)� dispone que:

[�]La aplicaci�n de buenas pr�cticas de ingenier�a para la determinaci�n de la altura de la chimenea, considera adicionalmente el an�lisis del impacto que generan las fuentes de emisi�n de contaminantes individualmente en la calidad del aire de la zona en la cual se encuentran ubicadas.

En este sentido, define que es considerada una buena pr�ctica la altura del ducto o punto de descarga que demuestre mediante la aplicaci�n de modelos de dispersi�n que permite la dispersi�n de los contaminantes y que adem�s las emisiones provenientes de la fuente no incrementan en m�s de un 40% la m�xima concentraci�n de alg�n contaminante a nivel delsuelo, es decir, el estudio se deber� realizar simulando las condiciones de calidad del aire con y sin el aporte de la fuente para determinar el cumplimiento de dicha condici�n.

Dicho an�lisis debe realizarse para cado uno de los contaminantes que le corresponde monitorear a la actividad. En el caso que uno de los contaminantes no cumpla con esta condici�n, no se podr� aplicar esta alternativa. Los modelos que se apliquen para el desarrollo de esta alternativa deben cumplir lo establecido por la Agencia de Protecci�n Ambiental de los Estados Unidos US-EPA mientras que el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial adopta la Gu�a Nacional de Modelaci�n de Calidad del Aire. Sin embargo, para definir la aplicaci�n de esta alternativa se deben tener en cuenta las siguientes consideraciones: (�)

Adicionalmente, independiente de la calidad del aire de la zona donde se encuentre ubicada la fuente, se podr�n aplicar modelos que incluyan los efectos de fumigaci�n, turbulencias y estelas que pueden ser creados por la fuente misma o por las estructuras cercanas. En este caso se debe correr un modelo con y sin las estructuras cercanas y evaluar en cada caso la m�xima concentraci�n al nivel del suelo del contaminante evaluado dentro del �rea de influencia, con el fin de determinar el incremento en la concentraci�n de los contaminantes, para lo cual se deber�n tener en cuenta las siguientes consideraciones:(�)

Para el caso de la aplicaci�n de modelos de dispersi�n, el t�rmino cercano se refiere a distancias de hasta ochocientos (800) metros, excepto cuando la altura de una condici�n del terreno a la distancia de 800 metros, medidos desde la fuente sea igual o superior al 40% de la altura de la chimenea, caso en el cual la regi�n cercana se extender� hasta una distancia de diez (10) veces la altura m�xima de dicha condici�n (HT) o 3200 metros (2 millas) la que sea menor (Ver Figura 14) Para determinar el �rea en la cual se debe aplicar el modelo de dispersi�n de los contaminantes, se debe medir la altura caracter�stica del terreno a una distancia de 800 metros (0,5 millas) y considerar las siguientes condiciones: (�)

Finalmente, es considerada como una buena pr�ctica de ingenier�a una altura m�xima de 65 metros medidos desde el nivel del suelo en la base de la chimenea. Esta altura se deber� aplicar para los casos en los cuales el c�lculo de la altura de la chimenea por medio de ecuaci�n d� como resultado un valor superior a este, es decir, que con una altura de 65 metros se considera que existe una adecuada dispersi�n de los contaminantes (Ver Figura 15).[�]

135. En cuanto a los estudios meteorol�gicos, el mismo apartado explica lo siguiente:

[�]La direcci�n predominante del viento se debe determinar con base en la informaci�n suministrada por las rosas de vientos definidas por el Instituto de Hidrolog�a, Meteorolog�a y Estudios Ambientales - IDEAM.

En los casos que se utilicen rosas de vientos que no hayan sido definidas por el IDEAM, �nicamente se aceptar�n rosas de vientos que est�n soportadas como m�nimo con un a�o de informaci�n de la zona.

Con el fin de determinar la direcci�n predominante del viento, no siempre se debe tomar el mayor de los valores de porcentaje de frecuencia que se muestre en la rosa.

En algunos casos, es necesario evaluar todas las frecuencias de direcci�n con el fin de encontrar la predominancia del viento. Para determinar la direcci�n predominante del viento de una zona espec�fica con el fin de determinar la altura de la chimenea mediante la aplicaci�n de Buenas Pr�cticas de Ingenier�a, se deben tener en cuenta las siguientes consideraciones:

� Cuando el mayor de los porcentajes de frecuencia corresponda a una condici�n de calma, este valor no se deber� considerar para determinar la direcci�n predominante del viento. En este caso, de deber� utilizar la informaci�n de las frecuencias en las dem�s direcciones.

� Cuando los mayores porcentajes de frecuencia de direcci�n tengan el mismo valor, el c�lculo de la altura de la chimenea se deber� realizar con cada una de estas direcciones y ser� la que d� como mayor valor de altura del ducto, la que se utilice como direcci�n predominante(�)

Aquellas actividades que de acuerdo con lo establecido en el art�culo 69 de la Resoluci�n 909 de 2008 tengan la obligaci�n de contar con un ducto o chimenea, deber�n cumplir con la altura obtenida luego de la aplicaci�n de las Buenas Pr�cticas de Ingenier�a de las que trata el presente cap�tulo, a m�s tardar el 15 de julio de 2012. El procedimiento y resultado obtenidos deber�n ser informados a la autoridad ambiental competente a m�s tardar el 15 de julio de 2011 para su conocimiento y seguimiento.[�]

136. De los anteriores apartados del protocolo, es dable concluir que la altura de una chimenea de estructura alta, y las condiciones de monitoreo, son aspectos que se deben definir siguiendo una serie de metodolog�as cuya aplicaci�n depende de las condiciones f�cticas del lugar en donde se ubica la fuente fija de emisi�n.

137. El citado protocolo tambi�n reconoce un margen de acci�n para que los solicitantes adecuen sus estudios a los modelos que elijan, pero tambi�n determina par�metros m�nimos y variables ligadas al resultado de las valoraciones.

138. Frente al deber de investigar la direcci�n predominante del viento, se observa el aludido margen de libertad cuando el protocolo se�ala que esta medici�n se har� con base en la informaci�n suministrada por las rosas de vientos definidas por el Instituto de Hidrolog�a, Meteorolog�a y Estudios Ambientales � IDEAM, o por las rosas de vientos que est�n soportadas como m�nimo con un a�o de informaci�n de la zona.

139. En el mismo sentido, al relacionar los modelos de dispersi�n, el protocolo se�ala que el titular de la actividad podr� aplicar los modelos previstos en ese protocolo o aquellos que cumplan lo establecido por la Agencia de Protecci�n Ambiental de los Estados Unidos US - EPA.

140. Ciertamente, el peticionario debe efectuar los estudios necesarios y pertinentes para concluir que horno crematorio no afectar� el entorno natural ni la salud de las personas que residen en la zona de influencia del proyecto. Por ello, la autoridad ambiental que eval�a un permiso de emisiones atmosf�ricas verifica a trav�s de esa documentaci�n las condiciones t�cnicas de las emisiones.

141. En esa medida, el art�culo 2.2.5.1.7.4. del Decreto 1076 exige al peticionario del permiso: i) describir la actividad, localizar sus instalaciones y presentar el concepto sobre uso del suelo, as� como ii) allegar la informaci�n meteorol�gica b�sica del �rea afectada por las emisiones, la informaci�n t�cnica del proyecto y el estudio t�cnico de evaluaci�n de las emisiones de sus procesos de combusti�n o producci�n.

142. Adem�s, cabe reiterar que: �la informaci�n presentada por el solicitante deber� ser veraz y fidedigna y es su deber afirmar que as� lo hace, bajo la gravedad del juramento que se entender� prestado por la sola presentaci�n de la solicitud�, en los t�rminos del par�grafo segundo del art�culo 2.2.5.1.7.5. del Decreto 1076.

III.4.2.2. Los asuntos acreditados en el proceso respecto de los cargos segundo y tercero

143. Como ya se mencion�, la parte actora afirma que la Resoluci�n 0828 desconoce los derechos a gozar de un ambiente sano y a la salud de las personas que residen en las zonas cercanas al proyecto parque cementerio Sercofun Los Olivos Ltda., porque esa actividad contraviene lo dispuesto en los art�culos 2�, 8�, 29, 79 y 95 de la Constituci�n Pol�tica, y en los art�culos 3, 5 y 6 de la Ley 1751 de 2015.

144. Alega la parte actora que la autoridad ambiental no corrobor� las condiciones m�nimas para la instalaci�n del sistema de monitoreo de emisiones, a saber: �la cercan�a de las concentraciones de los contaminantes emitidos por la fuente con los est�ndares m�ximos de emisi�n admisibles, los datos obtenidos de estudios de calidad del aire realizados en la zona donde se encuentra ubicada la fuente, las caracter�sticas de peligrosidad de los contaminantes emitidos y las poblaciones o grupos cercanos a la fuente (�) y de los riesgos que esta representa para el medio ambiente y para la salud de las personas�.

145. Adem�s, adujo que la CARDER desconoci� las buenas pr�cticas de ingenier�a en cuanto a los estudios meteorol�gicos y a la altura de chimenea, previstas en los numerales 4.3., 4.4. y 4.5 de la Resoluci�n 2153 de 2010, porque no evalu� las estructuras cercanas a la fuente de emisi�n y utiliz� la rosa de los vientos de una estaci�n que no era representativa.

146. Con miras a emitir pronunciamiento respecto de los anteriores planteamientos, cabe recordar que la medida de suspensi�n provisional procede �por violaci�n de las disposiciones invocadas en la demanda o en la solicitud que se realice en escrito separado, cuando tal violaci�n surja del an�lisis del acto demandado y su confrontaci�n con las normas superiores invocadas como violadas o del estudio de las pruebas allegadas con la solicitud�.

147. Lo anterior significa que la procedencia de la solicitud cautelar est� supeditada a que la parte actora acredite que la CARDER no evalu� acertadamente la capacidad del titular del permiso de corregir, compensar, mitigar o prevenir sus impactos ambientales negativos; o que los estudios que soportan esa decisi�n son falsos o incumplen con los par�metros normativos citados en el ac�pite III.4.2.1 de este prove�do.

148. Esta carga impuesta al demandante, tal como se refiri� con anterioridad, responde a lo reglado por el art�culo 229 del CPACA, conforme al cual el juez contencioso administrativo carece de facultades para adoptar cautelas cuyo prop�sito sea distinto al de �proteger y garantizar, provisionalmente, el objeto del proceso y la efectividad de la sentencia�.

149. Por ello, en el anterior ac�pite, el Despacho estudi� cu�les son los requisitos que debe cumplir quien pretenda obtener un permiso de emisiones atmosf�ricas. Tambi�n se�al� cu�les son las normas y est�ndares de emisi�n admisibles de contaminantes a la atm�sfera autorizados para hornos crematorios para incineraci�n de cad�veres de humanos. Y, adem�s, enunci� en qu� consiste el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas, y cu�les son los procedimientos, metodolog�as y c�lculos que se deben aplicar al momento de medir las emisiones de este tipo de proyectos.

150. En este contexto, y luego de evaluar el material probatorio obrante en esta etapa inicial del proceso, el Despacho advierte que las afirmaciones del demandante seg�n las cuales el proyecto genera riesgos a la salud humana, no se soportaron en evidencia cient�fica que permita contradecir los estudios que en sentido contrario present� el titular del proyecto en el tr�mite administrativo.

151. Como se mencion� en el apartado II.4.2.1. de este prove�do, el art�culo 2.2.5.1.7.4. del decreto 1076 exige al peticionario del permiso que informe a la autoridad ambiental sobre la localizaci�n de las instalaciones, la descripci�n de las obras, procesos y actividades que generen las emisiones y la evaluaci�n de las emisiones de sus procesos de combusti�n.

152. Por eso, en sede administrativa, la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda. aport� el formulario �nico nacional de solicitud de permiso de emisiones atmosf�ricas fuentes fijas, el documento T�cnico del Permiso de Emisiones Atmosf�ricas Generadas por Fuentes Fijas y el documento de evaluaci�n de Emisiones Atmosf�ricas que contiene el C�lculo de Altura de Chimenea BPI y el Plan de Contingencia Sistema Control de Emisiones PCSCE, con sus respectivos anexos[33].

153. La citada documentaci�n, en principio, da cuenta del cumplimiento de la normatividad ambiental citada en el anterior ac�pite, en cuanto a los niveles de emisiones autorizados por la Resoluci�n 909 de 2008, y a la metodolog�a de medici�n a que se refiere la Resoluci�n 2153 de 2010.

154. Respecto de los componentes t�cnicos del proyecto, el Despacho destaca los siguientes apartes del documento t�cnico de 20 de octubre de 2010 c�digo PEA ECP-01[34] que detallan las caracter�sticas generales del equipo de cremaci�n:

[�] En las instalaciones del Parque Cementerio SERCOFUN LOS OLIVOS Ltda., se instalar�n dos (2) hornos crematorios (uno de respaldo) con sistemas de quemadores en c�maras de combusti�n y poscombusti�n. En la primera C�mara el cuerpo es abarcado en su totalidad por las llamas alcanzando temperaturas iguales o mayores a 750 �C. (C�mara de combusti�n) y C�mara de combusti�n mayor o igual a 900 �C en la segunda C�mara (postcombusti�n). (�)

La temperatura de operaci�n del horno crematorio mantendr� una temperatura de operaci�n mayor o igual a 750 �C en la C�mara de combusti�n y mayor o igual a 900 �C en la C�mara de postcombusti�n cumpliendo con lo establecido en el art�culo 62 resoluci�n 909/08 MAVDT.

El horno crematorio contar� tambi�n con una C�mara de enfriamiento que reduzca la temperatura del gas a la salida, m�ximo hasta 250 �C. (sistema de control); cumpliendo con lo establecido en el art�culo 66. resoluci�n 909/08 MAVDT. [�]

155. El citado documento expl�citamente indica que: �por ser una actividad nueva se presenta medici�n directa realizada en un horno crematorio con las mismas caracter�sticas�. Tambi�n se�ala cu�l fue la metodolog�a utilizada para efectuar el estudio de emisiones del equipo evaluado, el cual cuenta con caracter�sticas similares al que se pretende instalar.

SERCOFUN Los Olivos Se encuentra ejecuciones para la compra de dos (2) Hola hornos crematorios nuevos de alta tecnolog�a acorde con la normativa vigente. Por ausencia de equipo no se determinaron de manera directa las emisiones atmosf�ricas por lo cual se presentan datos de un estudio de emisiones atmosf�ricas correspondientes a un equipo similar.

Los resultados de las emisiones de gases con contenido de material particulado (MP), mon�xido de carbono (CO), hidrocarburos totales (HCt) y sumatoria de benzopirenos y dibenzoantracenos (HAP`s) Cumplen con los est�ndares de la norma establecida en la resoluci�n 909 de 2008 MAVDT.

Aplicaci�n del literal 1.3 Resoluci�n 2153 de 2010 MAVDT, comparar las emisiones con la normatividad vigente resoluci�n 909 de 2008 expedida por el MAVDT, verificar la frecuencia de medici�n y el cumplimiento normativo.

Con los registros de emisiones atmosf�ricas se proceder� a determinar la altura de la chimenea de manera que garantice la adecuada dispersi�n establec�a en el art�culo 70 de la resoluci�n 909 de 2008 MAVDT.

(�) La informaci�n suministrada hace referencia al equipo que se pretende instalar, horno nuevo que garantizar� por compromiso el proveedor, una respuesta positiva en cuanto a cumplimiento de la normatividad ambiental resoluci�n 909/08, es importante aclarar que la empresa �SERCOFUN LOS OLIVOS Ltda� a�n no ha adquirido el equipo horno crematorio, pero para efectos del tr�mite del permiso de emisiones se deben presentar registros indicadores de emisiones que permitan adelantar la respectiva autorizaci�n de car�cter ambiental. [�]

156. Los resultados de la evaluaci�n del horno crematorio con caracter�sticas similares son los siguientes:

[�] es importante informar que los registros son punto de referencia para efectos del tr�mite del permiso de emisiones atmosf�ricas, las mediciones para el horno a instalar ser�n ejecutadas por laboratorios acreditados por el IDEAM y bajo las condiciones reales de operaci�n.

Durante el c�lculo del estimado de emisiones se suministr� informaci�n de referencia de un estudio reciente de emisiones (marzo de 2014), documento facilitado por el asesor del tr�mite, los m�todos de evaluaci�n fueron los establecidos por el IDEAM/EPA USA, las mediciones en campo y laboratorio fueron ejecutados con laboratorios con la acreditaci�n vigente ante el IDEAM en norma IEC 17025. [�]

157. En cuanto al cumplimiento de los est�ndares de emisiones atmosf�ricas, el aludido documento explica lo siguiente:

[�]4.3 Registros de emisiones atmosf�ricas de referencia del horno crematorio Implementar

Mediante el empleo de m�todos de muestreo de referencia EPA-IDEAM con Laboratorio acreditado ante el IDEAM se present� el informe de emisiones atmosf�ricas en el horno crematorio, registros conformes ante la norma vigente Resoluci�n 909 de 2008 MAVDT (�)

Los resultados permiten inferir que el par�metro de mayor inter�s para la adecuada dispersi�n de contaminantes es el material particulado (MP), calcular la altura m�nima en aplicaci�n de la Resoluci�n 1632 del MADS para este par�metro brinda la seguridad para los dem�s contaminantes evaluados. [�]

[�]3.14 Comparaci�n de las emisiones atmosf�ricas con la norma nacional vigente

Para efectos del presente informe los datos del informe anterior, ser�n de referencia para las emisiones atmosf�ricas en el horno crematorio a instalar en la jurisdicci�n del municipio de Pereira, departamento de Risaralda, el cual se compara con la norma establecida en la Resoluci�n 909 de 2008 del MAVDT as�:

Las emisiones cumplen con los est�ndares establecidos en la norma Nacional Colombiana Resoluci�n 909 de 2008.

SERCOFUN LOS OLIVOS LTDA, se compromete durante la vigencia otorgada por el permiso de emisiones a cumplir las obligaciones establecidas en la Resoluci�n 909 de 2008 articulos 62 (�) (,) 63 (�) (,) 64 65 (�) (,) 66 (�) (,) 70 (�) (,) 78 (�) (,) 79(�) (,) 80 (�) (y) 81 [�]

159. Frente a la informaci�n meteorol�gica, el documento indica lo siguiente:

[�] 5.1. Informaci�n de estaci�n meteorol�gica cercana "Estaci�n ECT Lago"

El viento sopla en todas las direcciones. los vientos en calma (menores a OS m/s) son bajos NW, N y SE.

La primera direcci�n predominante es la Norte Este con una frecuencia det 24 % con velocidades entre (3.5 y 5.4) m/s estos son los vientos protag�nicos de la zona.

La segunda direcci�n predominante es la E con una frecuencia del 13 % las velocidades oscilan entre (3.4 y 5.4) m/s. La tendencia de dispersi�n de todo tipo de contaminantes tiene un impacto en el cuadrante Norte Norte, Occidente-Occidente (NNE-NEE). [�]

160. Respecto de los estudios realizados para determinar la altura de la chimenea, el cap�tulo denominado �protocolo para el control y vigilancia de la contaminaci�n atmosf�rica generada por fuentes fijas- Resoluci�n 2153 de 2010�, tambi�n el documento explica lo siguiente:

Los gases enfriados a la salida van a la chimenea la cual tiene una altura de cat�logo de 16 m y un di�metro de 40 cms. A trav�s de la chimenea los gases son evacuados a la atm�sfera[�]

[�]C�lculo de altura de chimenea en horno crematorio seg�n norma resoluci�n 1632 de 2012 MADS

En la aplicaci�n de la resoluci�n 1632 de 2012 MADS, y con base en los resultados de la medici�n directa realizada a un equipo similar, se procedi� a validar la altura de la chimenea a instalar y que ser� suministrada por la empresa SERCOFUN Los Olivos Ltda, que para las condiciones reales ser� de 16 metros m�nimo de altura medidos desde la base donde se instalar� el horno; lo que permiti� concluir que la altura de establec�a de 15 metros es viable y garantiza mediante las �Buenas Pr�cticas de Ingenier�a-BPI� La dispersi�n de los contaminantes.

En cumplimiento del Art�culo 70. Determinaci�n de la altura del punto de descarga de la Resoluci�n 909 de 2008 del MAVDT, la altura del punto de descarga (chimenea o ducto) se determinar� con base en la altura o el ancho proyectado de las estructuras cercanas, entre otros criterios, siguiendo las Buenas Pr�cticas de Ingenier�a tanto para instalaciones existentes como nuevas, establecidas en el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas. En todo caso la altura m�nima debe garantizar la dispersi�n de los contaminantes.[�]

Los ajustes de flujo m�sico de condiciones de chimenea a condiciones de referencia emplearon la ecuaci�n del art�culo 86 de la Resoluci�n de 2008 MAVDT, igualmente la conversi�n del flujo del contaminante en unidades mg/rn3 a unidades Kg/ll empleo la ecuaci�n del art�culo 87 de la Resoluci�n 909 dc 2008 MAVDT (�)

Con los datos de entrada se aplica el procedimiento establecido en la Resoluci�n 1632 de 2012 MADS, la aplicaci�n dispone de restricciones del factor de correcci�n S de la tabla 12 el cual s�lo dispone factores para MP y CO dem�s contaminantes no disponen de factor S. No obstante y bajo las mediciones presentadas el caso m�s cr�tico es para el MP (material Particulado).

El procedimiento establece que con el di�metro de chimenea de 0,40 m. se cruza de manera horizontal la curva de temperatura de chimenea de 243 grados Celsius trazando una vertical buscando el valor de la cuwa de flujo volum�trico del gas en chimenea en (m3/H) a condiciones de referencia variable (R), con este punto de referencia se busca, en eje horizontal, la relaci�n de Flujo de carga versus Factor S el cual para el caso espec�fico es muy bajo para MP y CO con valores de 0,00012 y 0,0004 Kg/H respectivamente.

Este cuadrante derecho del nomograma tiene un ingreso decreciente en la carga contaminante, iniciando en cero (0) y aumentando en escala 10, 100, 1.000, 10,000 Kg/H. El Resultado de la altura de chimenea (H), empleando el nomograma es de 10metros, calculado bajo la condici�n m�s cr�tica de emisiones de material particulado (MP).

En aplicaci�n del art�culo 4.5.1 de la Resoluci�n 1632 de 2012 MADS "La altura m�nima de la chimenea o ducto debe ser por lo menos 3 metros (m) superior a la altura del edificio que contiene el ducto o chimenea". Acatando la exigencia normativa la altura de la chimenea con ajuste por estructura del edificio debe superar la altura de techo que la contenga en 3 metros.

Comparaci�n de la altura proyectada con la altura calculada seg�n Resoluci�n 1632 de 2012 MADS.

Altura calculada 15 m. La altura proyectada de la Chimenea del horno crematorio de SERCOFUN LOS Olivos Ltda. seg�n el proveedor del equipo ser� de 16 metros, altura que brindar� el cumplimiento de la Normatividad vigente establecida en la Resoluci�n 1632 de 2012 MADS y el art�culo 70 de la Resoluci�n 909 de 2008 MAVDT [�]

161. En el expediente obra igualmente el concepto t�cnico 00207 de 5 de febrero de 2018 que autoriz� la respectiva emisi�n. Este documente fue elaborado por los funcionarios y contratistas de CARDER Guillermo Antonio Rinc�n Sanz[35], Alexandra Villegas Morales[36], Hugo Alberto Hincapi�[37], Ana Mar�a Mej�a Jim�nez[38], Rafael Augusto Pinzon Ossa[39] y Paola Holguin Giraldo[40], y en sus ac�pites pertinentes se�ala lo siguiente:

162. El mismo concepto contiene 13 recomendaciones relacionadas con el cumplimiento del plan de contingencia, y con el acatamiento de la Resoluci�n 909 de 2008.

163. Del anterior recuento probatorio, la Sala unitaria concluye que hasta este momento procesal, ciertamente no obran suficientes elementos de juicio para desvirtuar la presunci�n de legalidad que cobija al acto acusado. Es m�s, ninguna de las normas que el demandante cita como transgredidas autorizan a la autoridad ambiental para que desconozca los estudios de emisiones que le presenta el peticionario, bajo el argumento consistente en que se trata de equipos de cremaci�n con caracter�sticas similares.

164. Es una realidad que la direcci�n predominante del viento y las estructuras cercanas a la fuente de emisi�n son dos variables fundamentales al momento de determinar la altura de la chimenea y el nivel de dispersi�n de los contaminantes generados por el horno crematorio. Sin embargo, solo un perito puede entrar a determinar si el estudio que present� la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda. no contempl� las estructuras cercanas a ese proyecto, o si desconoci� la metodolog�a de calculo prevista en la Resoluci�n 2153 de 2010.

165. La misma parte actora reconoci� lo anterior cuando solicit� en su demanda la pr�ctica de la siguiente prueba:

Ruego al Honorable Consejo de Estado, que de acuerdo con lo dispuesto en los art�culos 226 y ss del CGP, se admita la prueba pericial realizada por un ingeniero top�grafo certificado para la verificaci�n de lo siguiente:

a. La existencia y ubicaci�n de viviendas en un �rea de 150 metros contados a partir del lote donde se establecer� el Cementerio Los Olivos con horno crematorio

b. La cantidad y ubicaci�n de viviendas y otros establecimientos de servicio y comercio del �rea cercana al proyecto, de 800 metros en todas direcciones a partir del terreno donde se desarrollar� el proyecto del parque cementerio con horno crematorio

c. La existencia de estructuras cercanas, tales como edificaciones y �rboles y su altura, en un �rea de 150 metros en todas las direcciones a partir del terreno donde se desarrollar� el proyecto del parque cementerio con horno crematorio d. Cualquier otro punto que el despacho considere pertinente. [�]

166. N�tese que las fotograf�as y los registros de Google maps que present� el demandante para justificar la premisa consistente en que la CARDER no valor� las estructuras cercanas a la fuente de emisi�n, no han sido plenamente identificadas y tampoco indican el momento ni el autor de la captura fotogr�fica.

167. Esta Corporaci�n judicial[41] y la Corte Constitucional pac�ficamente han sostenido que el valor probatorio de las pruebas fotogr�ficas depende de su autenticidad formal y requiere de la confrontaci�n con otros medios probatorios complementarios. Estas pruebas documentales solo pueden ser valoradas, conforme a las reglas de la sana cr�tica, cuando exista certeza sobre la persona que las realiz� y las circunstancias de tiempo, modo y lugar en que fueron tomadas. De ah� que, su valor probatorio �no depende �nicamente de su autenticidad formal, sino de la posibilidad de establecer si la imagen representa la realidad de los hechos que se deducen o atribuyen, y no otros diferentes, posiblemente variados por el tiempo, el lugar o el cambio de posici�n�[42]

168. Adem�s, es importante precisar que la existencia de estructuras cercanas a la fuente de emisi�n no significa per se que el proyecto incumpla con los par�metros ambientales y de ingenier�a a que alude el demandante. La metodolog�a dispuesta en la Resoluci�n 2153 de 2010 se�ala que el estudio de mediciones debe considerar tales estructuras para evaluar el nivel de dispersi�n del material particulado, m�s no sugiere que en el radio de 800 metros no puedan existir construcciones o �rboles, como lo indica la parte actora.

169. De otro lado, en cuanto a los estudios meteorol�gicos allegados para determinar la direcci�n del viento, es importante destacar que el titular del proyecto utiliz� dos fuentes de informaci�n: METEO BLU y el IDEAM. Ello teniendo en cuenta que el numeral 4.4 del Protocolo adoptado en la Resoluci�n 2153 de 2010, otorga cierto margen de libertad t�cnica en la materia. As�, el protocolo se�ala que la direcci�n se fijara �con base en la informaci�n suministrada por las rosas de vientos definidas por el Instituto de Hidrolog�a, Meteorolog�a y Estudios Ambientales - IDEAM�. Pero tambi�n indica que �en los casos que se utilicen rosas de vientos que no hayan sido definidas por el IDEAM, �nicamente se aceptar�n rosas de vientos que est�n soportadas como m�nimo con un a�o de informaci�n de la zona�.

170. Lo anterior significa, en principio, que en la etapa probatoria se deber� determinar: i) cu�l fue la fuente de informaci�n que utiliz� el peticionario, y si (ii) esa fuente es o no representativa seg�n lo dispuesto en la Resoluci�n 2153 de 2010.

171. Adicionalmente, cabe agregar que los documentos del IDEAM de 15 y 16 de mayo de 2019 -que aport� la demandante a efectos de desacreditar la informaci�n meteorol�gica del proyecto- no identifican la matricula inmobiliaria del predio objeto del pronunciamiento.

172. En efecto, el oficio 20191020001971 de 16 de mayo de 2019, suscrito por el jefe de oficina de asesor�a jur�dica del Instituto de Hidrolog�a Meteorolog�a y Estudios Ambientales - IDEAM[43], da cuenta de lo siguiente:

[�] La accionante sustenta su solicitud de amparo en el supuesto de que la entidad no ha otorgado respuesta a su derecho de petici�n del 21 de mayo de 2019, en donde solicita la medici�n de la Rosa de los vientos en un predio ubicado en el corregimiento de tribunas, sector Paraje de Condina, Armenia, en el suroriente del municipio de Pereira, de identificaci�n se�alada en su derecho de petici�n. Sin embargo no le asiste raz�n (�) debido a que no solo el IDEAM efectivamente dio respuesta a su petici�n (�), entreg�ndole la informaci�n con que se cuenta sobre la Rosa de los vientos referente a la estaci�n del aeropuerto mateca�a de la ciudad de Pereira, sino que Adicionalmente se encuentra en imposibilidad de determinar la dispersi�n de los contaminantes de la fuente fija puntual, concretamente al horno crematorio para cad�veres humanos situado a 15 km del predio indicado, dada la ausencia de instalaci�n cercana a la zona.

Como se indic� la estaci�n m�s cercana corresponde a la del aeropuerto mateca�a Pereira, y en la misma solicitud se se�ala que se encuentra ubicada a 15 km de distancia de la fuente, motivo por el cual no es v�lida la Rosa de los vientos de dicha estaci�n, y tampoco es posible efectuar su medici�n con ocasi�n de la distancia. [�]

173. A su vez, el oficio 20194000004741 de 15 de mayo de 2019, elaborado por el subdirector de Meteorolog�a del IDEAM, Eliezer David D�az Almanza, precisa lo siguiente:

[�] En atenci�n a su solicitud formulada mediante oficio de 21 de marzo de 2019 y en cumplimiento del fallo de tutela de fecha 15/05/2019 proferido por el juzgado 54 administrativo de Bogot� (�) me permito comunicarle que el IDEAM no cuenta con estaciones meteorol�gicas con sensores de viento cercanas al sitio de su inter�s y la m�s pr�xima se encuentra a 15 km y no es representativa para describir la variable viento.

igualmente me permito comunicarle que el viento puede variar de un lugar a otro, Por ser un movimiento natural del aire y este movimiento es raramente regular. normalmente es turbulento con torbellinos de forma y dimensiones variadas que se desarrollan en el aire y perturban su flujo. el efecto de la turbulencia cerca de la superficie terrestre es la producci�n de variaciones r�pidas e irregulares de la velocidad y de la direcci�n del viento, independientes unas de otras. algunas veces el movimiento del aire es perturbado por numerosos factores como la rigurosidad del suelo, la naturaleza de la superficie, las fuentes de calor, la presencia de monta�as, edificios �rboles u otros obst�culos. en consecuencia, los instrumentos medidores de velocidad y direcci�n del viento no siempre van a registrar las caracter�sticas particulares del viento en el entorno de la estaci�n y la representatividad de la medici�n se limita a unos pocos kil�metros cuadrados alrededor del sitio en donde se encuentran instalados. [�]

174. Por �ltimo, no se puede olvidar que el art�culo 73 de la Resoluci�n 909 expresamente reconoci� que: �cuando no sea posible realizar el estudio de emisi�n por cualquiera de los m�todos de referencia establecidos en el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas, o cuando se facilite la aplicaci�n de un m�todo alternativo, la industria podr� solicitar a la autoridad ambiental competente la autorizaci�n para el empleo de un m�todo alternativo de acuerdo a lo establecido en dicho protocolo�.

175. En ese orden, existe una duda respecto de la identidad de los predios, la metodolog�a aplicable al caso y la pertinencia de los estudios meteorol�gicos, aspectos que deber�n solventarse en la etapa probatoria.

176. En este orden de ideas, es dable concluir -en esta etapa primaria del proceso- que la parte actora a�n no ha demostrado que sean falsos o err�neos los resultados contenidos en los estudios anexos al permiso o que el equipo a implementar no cuente con caracter�sticas similares respecto del horno crematorio cuya evaluaci�n cumple con la normatividad ambiental.

177. El Despacho insiste en que, de conformidad con lo dispuesto en el par�grafo segundo del art�culo 2.2.5.1.7.5. del Decreto 1076, la informaci�n que presenta el solicitante, bajo la gravedad del juramento, para obtener el permiso, se entiende veraz y fidedigna. Ello significa que tales resultados ser�n objeto de contradicci�n, verificaci�n y an�lisis al momento de la valoraci�n definitiva de las pruebas ya aportadas al expediente y de aquellas que -de oficio o a solicitud de parte- se decreten en la audiencia inicial y se practiquen en desarrollo de la audiencia que trata el art�culo 181 del CPACA.

178. Ciertamente, la suspensi�n provisional de los efectos jur�dicos de un acto administrativo solo resulta procedente cuando la autoridad judicial advierte que las normas superiores invocadas como violadas fueron trasgredidas, a partir de un acercamiento primario al asunto objeto de juzgamiento.

179. Con sustento en esta tesis, la Secci�n Primera del Consejo de Estado reiteradamente se ha abstenido de validar la procedencia de una cautela en la que existe una duda jur�dica o probatoria respecto de los presupuestos del juicio de legalidad. As�, en las providencias de 4 de marzo de 2020[44], de 9 de julio de 2020[45], y de 30 de septiembre de 2021[46], este Despacho insisti� en la necesidad de agotar el debate probatorio para dilucidar la verdad procesal en los escenarios judiciales que ofrecen incertidumbres demostrativas.

180. En el mismo sentido, la Secci�n Quinta de esta Corporaci�n en los autos de 18 de septiembre de 2012[47], 17 de marzo de 2016[48] y 27 de junio de 2018[49], neg� por improcedentes aquellas peticiones cautelares en las que el juez ten�a dudas sobre los supuestos de transgresi�n del ordenamiento superior[50].

181. Por todo lo anterior, es necesario negar la solicitud de amparo, con fundamento en los cargos dos y tres, pues en el expediente no est� acreditado que la Resoluci�n 0828 transgreda los art�culos 2�, 8�, 79 y 95 de la Constituci�n Pol�tica, los art�culos 3, 5 y 6 de la Ley 1751 de 2015, los art�culos 2.2.5.1.2.1, 2.2.5.1.2.2., 2.2.3.3.5.3. y 2.2.5.1.7.2. del Decreto 1076 de 2015, el art�culo 75 de la Resoluci�n 909 de 2008, el numeral 3.5.1. de la Resoluci�n 2153 de 2010, o incurra en los vicios de falsa motivaci�n y expedici�n irregular.

182. Es preciso anotar que tampoco la Junta demandante demostr� que la evaluaci�n del permiso de emisiones atmosf�ricas desconozca los numerales 4.3., 4.4. y 4.4. de la Resoluci�n 2153 de 2010 porque a�n no se han recaudado las pruebas necesarias para corroborar que la fuente de emisi�n cuente con deficiencias t�cnicas en cuanto a la altura de la chimenea o al estudio de direcci�n de los vientos.

III.4.3. De los reparos (cuarto y quinto) relacionados con la evaluaci�n del permiso de vertimientos

183. La parte demandante asegur� que la Resoluci�n 0828 est� falsamente motivada, incurre en el vici� de expedici�n irregular y transgrede lo ordenado por los art�culos 2�, 8�, 79 y 95 de la Constituci�n Pol�tica, por los numerales 5� y 8� del art�culo 2.2.3.3.5.3. del Decreto 1076 de 2015 y por el art�culo 162 de la Ley 9 de 1979, en tanto desconoce los derechos a gozar de un ambiente sano y el deber del Estado de conservar las riquezas naturales de la naci�n, y salvaguardar la diversidad e integridad del ambiente y los recursos naturales del pa�s.

184. Igualmente, indic� que la Evaluaci�n Ambiental de Vertimiento de Aguas no predijo, a trav�s de modelos de simulaci�n, los impactos que causara en el recurso h�drico y en el suelo, ni se�al� cu�l ser�a la incidencia negativa del proyecto, obra o actividad en la calidad de la vida o en las condiciones econ�micas, sociales y culturales de los habitantes del sector en donde se pretende desarrollar la obra, a pesar de lo reglado por los numerales 5� y 8� del art�culo 2.2.3.3.5.3. del Decreto 1076 de 2015.

185. Tambi�n destac� que el vertimiento de aguas residuales dom�sticas y no dom�sticas producir� efectos en el barranco y en el recurso h�drico que colinda con el proyecto del cementerio. Adem�s, ese territorio est� catalogado como zona de protecci�n de la Quebrada Andahuaylas. De manera que el proyecto colinda con un barranco cuya pendiente es de 89 % y dimensi�n de 97 metros, infringiendo as� el art�culo 162 de la Ley 9 de 1979.

186. Para efectos de emitir pronunciamiento en relaci�n con los citados planteamientos, es importante mencionar que las normas constitucionales cuya transgresi�n invoc� la junta de acci�n comunal demandante desarrollan el postulado de la conservaci�n del entorno natural como un derecho colectivo y un asunto de inter�s general. El art�culo 2� de la Constituci�n se�ala que la integridad territorial y la salvaguarda de los principios, derechos y deberes son fines esenciales del Estado. El art�culo 8� consagra la obligaci�n del Estado y de las personas de proteger las riquezas naturales de la Naci�n. El art�culo 79 reconoce el derecho a gozar de un ambiente sano. Y el art�culo 95 ibidem enuncia el deber de todas las personas de proteger velar por la conservaci�n de un ambiente sano.

187. Bajo este marco constitucional, el art�culo 137 del C�digo Nacional de Recursos Naturales Renovables y de Protecci�n al Medio Ambiente se�al� que las �corrientes de aguas, naturales o artificiales, que se encuentren en �reas declaradas dignas de protecci�n� �ser�n objeto de protecci�n y control especial�. Y, en su art�culo 145, agreg� que: �cuando las aguas servidas no puedan llevarse a sistema de alcantarillado, su tratamiento deber� hacerse de modo que no perjudique las fuentes receptoras, los suelos, la flora o la fauna�.

188. En desarrollo de lo anterior, el art�culo 2.2.3.3.4.3. del Decreto 1076 proh�be verter sin tratamiento residuos l�quidos que puedan contaminar el suelo o que ocasionen altos riesgos para la salud y los recursos hidrobiol�gicos. Por su parte, el art�culo 2.2.3.3.5.1 de la misma normativa, dispone que: �toda persona natural o jur�dica cuya actividad o servicio genere vertimientos a las aguas superficiales, marinas, o al suelo, deber� solicitar y tramitar ante la autoridad ambiental competente, el respectivo permiso de vertimientos�.

189. Ahora bien, para obtener dicho permiso el art�culo 2.2.3.3.5.2. del Decreto ibidem enlista los siguientes requisitos relacionados con el caso concreto:

[�] ART�CULO 2.2.3.3.5.2. Requisitos del permiso de vertimientos. El interesado en obtener un permiso de vertimiento, deber� presentar ante la autoridad ambiental competente, una solicitud por escrito que contenga la siguiente informaci�n: (�)

10. Plano donde se identifique origen, cantidad y localizaci�n georreferenciada de las descargas al cuerpo de agua o al suelo.

11. Nombre de la fuente receptora del vertimiento indicando la cuenca hidrogr�fica o unidad ambiental costera u oce�nica a la cual pertenece.

16. Caracterizaci�n actual del vertimiento existente o estado final previsto para el vertimiento proyectado de conformidad con la norma de vertimientos vigente.

17. Ubicaci�n, descripci�n de la operaci�n del sistema, memorias t�cnicas y dise�os de ingenier�a conceptual y b�sica, planos de detalle del sistema de tratamiento y condiciones de eficiencia del sistema de tratamiento que se adoptar� (�)

19. Evaluaci�n ambiental del vertimiento, salvo para los vertimientos generados a los sistemas de alcantarillado p�blico.

190. En cuanto al requisito de la evaluaci�n ambiental del vertimiento, el art�culo 2.2.3.3.5.3 ibidem -citado por el demandante como trasgredido- prev� lo siguiente:

[�] ART�CULO 2.2.3.3.5.3. Evaluaci�n ambiental del vertimiento. La evaluaci�n ambiental del vertimiento deber� ser presentada por los generadores de vertimientos a cuerpos de aguas o al suelo que desarrollen actividades industriales, comerciales y/o de servicio, as� como los provenientes de conjuntos residenciales y deber� contener como m�nimo:

(�) 5. Predicci�n y valoraci�n de los impactos que puedan derivarse de los vertimientos generados por el proyecto, obra o actividad al suelo, considerando su vocaci�n conforme a lo dispuesto en los instrumentos de ordenamiento territorial y los Planes de Manejo Ambiental de Acu�feros. Cuando estos �ltimos no existan, la autoridad ambiental competente definir� los t�rminos y condiciones bajo los cuales se debe realizar la identificaci�n de los impactos y la gesti�n ambiental de los mismos. (�)

7. Descripci�n y valoraci�n de los impactos generados por el vertimiento y las medidas para prevenir, mitigar, corregir y compensar dichos impactos al cuerpo de agua o al suelo.

8. Posible incidencia del proyecto, obra o actividad en la calidad de la vida o en las condiciones econ�micas, sociales y culturales de los habitantes del sector o de la regi�n en donde pretende desarrollarse y medidas que se adoptar�n para evitar o minimizar efectos negativos de orden sociocultural que puedan derivarse de la misma.

9. Estudios t�cnicos y dise�os de la estructura de descarga de los vertimientos, que sustenten su localizaci�n y caracter�sticas, de forma que se minimice la extensi�n de la zona de mezcla. [�]

191. Significa lo anterior que quien pretenda obtener un permiso de vertimientos debe describir los elementos f�sicos y la infraestructura que caracteriza su actividad, as� como calcular los respectivos impactos que generar� el proyecto en su �rea de influencia.

192. Siendo ello as�, el Despacho observa, en principio, que la sociedad Sercofun Los Olivos Ltda. cumpli� con tales par�metros al momento de presentar la solicitud de permiso, concretamente: en el documento t�cnico del Permiso de Vertimientos[51], en la Evaluaci�n Ambiental del Vertimiento[52], en el documento de memorias del C�lculo Planta de Tratamiento de Agua Residual (PTAR)[53], en el Manual de Usuario Operaci�n y Mantenimiento Planta de Tratamiento de Agua Residual (PTAR)[54], en el Plan de Gesti�n del Riesgo y Manejo de Vertimientos[55], y en el documento t�cnico de Demarcaci�n de Suelos de Protecci�n[56].

193. Precisamente, el documento denominado �evaluaci�n ambiental permiso de vertimiento�, elaborado por Andr�s Felipe Hoyos[57] y revisado por Carolina Lenis[58], da cuenta de lo anterior en el apartado que describe el proceso productivo y de gesti�n de las aguas residuales y no residuales. Tal estudio igualmente explica c�mo se har� el tratamiento para cada uno de estos vertimientos, en el siguiente sentido:

2. MEMORIA DETALLADA DEL PROYECTO, ESPECIFICACIONES DE PROCESOS Y TECNOLOG�AS QUE SON EMPLEADOS EN LA GESTI�N DEL VERTIMIENTO (�)

La actividad que incide directamente en la generaci�n de vertimientos no dom�sticos es la preparaci�n de cad�veres, este proceso se llev� a cabo en el laboratorio de tanatolog�a, en donde se realizan los procedimientos de lavado y preservaci�n de cuerpos, tal y como se describe a continuaci�n: (�)

El parque cementerio SERCOFUN Los Olivos de Pereira es un proyecto nuevo en la ciudad, por lo que no existe referencia sobre las caracter�sticas espec�ficas del agua residual que se generar� en el laboratorio de tanatolog�a; por tanto, se relacionan en este documento las caracter�sticas te�ricas de aguas residuales no tratadas, encontradas para este tipo de actividades: (�)

Fuente: caracterizaci�n de vertimientos PTAR Parque Cementerio Los Olivos Ibagu� (T).

(�) 2.1.3. Tecnolog�a empleada en la gesti�n del vertimiento no dom�stico

(�) el laboratorio ha sido dise�ado para garantizar una capacidad m�xima de preparaci�n de diez (10) cuerpos al d�a, para los cuales se utilizan 720 litros de agua por cuerpo. el tiempo total entre la preparaci�n del cuerpo y la limpieza del laboratorio de 1 hora. No obstante, se espera realizar un promedio de 4 servicios diarios.

(�) 2.1.4. Par�metros de Dise�o Planta de Tratamiento de Aguas Residuales no Dom�sticas

Las aguas residuales dom�sticas generadas en �rea administrativa, bater�as sanitarias y zonas sociales del parque cementerio SERCOFUN Los Olivos, se componen principalmente de materia fecal, orina, jab�n y restos de alimentos; poseen olor desagradable por el exceso de materia Org�nica en descomposici�n y color con el que el tiempo va adquiriendo el tono gris�ceo. (�)

La tecnolog�a propuesta para tratar los vertimientos de tipo dom�stico generados en el parque cementerio corresponde a un Sistema de Tratamiento Anaer�bio construido en mamposter�a y compuesto por: trampa de grasas, tanque s�ptico de doble compartimiento, filtro anaerobio de flujo ascendente y zanjas de infiltraci�n para disposici�n del efluente tratado. [�]

194. En cuanto a la disposici�n final de efluentes dom�sticos y no dom�sticos, el estudio indica cu�l fue la metodolog�a para verificar que la disposici�n en zanjas no afectara el suelo. De los resultados, se destacan los siguientes apartes:

[�] Para calcular la longitud de las zanjas, debieron efectuarse las pruebas de percolaci�n respectivas, cuyos resultados se muestran a continuaci�n: (�)

Se realizaron dos (2) pruebas de percolaci�n y permeabilidad del terreno a diferentes estratos del suelo, acorde con el nivel de localizaci�n que se tendr� para las zanjas; �stas se realizaron en distintos puntos del lote, con el fin de agrupar los datos obtenidos y lograr una mayor precisi�n en los datos de permeabilidad.

(�) Se requieren entonces en total 263.33 metros de zanjas que se aproximan a 264 metros con distribuci�n de ramales seg�n topograf�a del terreno (la distribuci�n de zanjas puede observarse en el plano de localizaci�n anexo); por lo que se propone instalar: (�)

(�) Las zanjas de infiltraci�n garantizar�n la distribuci�n uniforme del caudal instalando las cajas adecuadas con ca�uelas que sean necesarias seg�n la cantidad de ramales. [�]

195. Por su parte, el documento denominado �Plan de gesti�n de riesgos para el manejo de vertimientos� igualmente describe el sistema de tratamiento de aguas residuales y el �rea de influencia del proyecto, as�:

[�] El Parque Cementerio SERCOFUN Los Olivos Ltda., de Pereira, tiene como objetivo espec�fico prestar los servicios de tanatopraxia, inhumaci�n, exhumaci�n y cremaci�n de cad�veres. dado que la instalaci�n y puesta en marcha de este tipo de actividades genera vertimientos dom�sticos y hospitalarios que requieren ser manejados integralmente para minimizar los impactos negativos que puedan ocasionar al ambiente (espec�ficamente al recurso agua), es indispensable garantizar adem�s del tratamiento de las aguas residuales, las acciones a ejecutar en caso de que los vertimientos generen derrames que afecten el �rea de influencia directa del proyecto. la recopilaci�n de informaci�n se efectu� trav�s del an�lisis de registros existentes y visitas a la zona.

(�) reunidos los datos de caracterizaci�n de peligros y exposici�n de la comunidad aleda�a, se procedi� a proyectar el documento denominado Plan de Gesti�n del Riesgo para el Manejo de Vertimientos, con el que se evaluar�n los efectos sobre el medio, por la operaci�n del Parque Cementerio.

[�] 1.2.1. Descripci�n de los sistemas de tratamiento de aguas residuales

A continuaci�n se describen de manera general los componentes propuesto para el tratamiento de los vertimientos generados en el Parque Cementerio:

Desde el punto de vista biof�sico, el �rea de influencia directa del proyecto, corresponde a los sitios en los que se ubicar�n los sistemas de tratamiento de aguas residuales.

El �rea de influencia directa visto desde el punto socioecon�mico corresponde a las viviendas ubicadas en los sectores aleda�os, sin embargo a esta distancia el proyecto dif�cilmente se ver�an afectados por una contingencia presentada en los STAR a construir en el parque cementerio.

Entre las actividades m�s significativas que definen la base econ�mica del �rea de influencia se identifican grandes �reas de pastos localizados en el corregimiento de tribunas dedicadas a la ganader�a intensiva; las personas que podr�an verse afectadas corresponder�an a moradores del sector y propietarios de fincas recreativas ubicadas en la zona. (�)

El �rea de influencia f�sico-bi�tica se caracteriza por tener clima templado la mayor parte del a�o, temperaturas promedio 20 �C aproximadamente, topograf�a monta�osa, vegetaci�n de bajo porte y mediana diversidad. (�)

Corresponde a las viviendas y cultivos ubicados por fuera del radio de influencia directa (100 m aproximadamente) considerados como �rea de influencia indirecta del proyecto Parque Cementerio SERCOFUN Los Olivos Ltda., de Pereira [�]

196. Adem�s, el numeral 4� de la Evaluaci�n Ambiental del Vertimiento[59] contiene una predicci�n y valoraci�n de los impactos que pueden derivarse de los vertimientos generados por el proyecto en el suelo, as�:

[�] 4. PREDICCCION Y VALORACION DE LOS IMPACTOS QUE PUEDEN DERIVARSE DE LOS VERTIMIENTOS GENERADOS POR EL PROYECTO, SOBRE EL SUELO Y SUS USOS.

Los impactos derivados de los vertimientos generadores en el Parque Cementerio SERCOFUN Los Olivos de Pereira, se relacionan principalmente con los factores descritos a continuaci�n:

197. Aunado a ello, Sercofun Los Olivos Ltda. previ�, en el numeral 1.1. del Plan de Gesti�n del Riesgo y Manejo de Vertimientos[60], los impactos directos e indirectos del proyecto hacia el suelo, de la siguiente manera:

[�] El �rea de influencia directa (AID) del proyecto, es aquella en donde se manifiestan los impactos generados por las actividades desarrolladas en el Parque Cementerio (�) como el de fallas de los sistemas (�) relacionada con el sitio del proyecto e infraestructura asociada; el �rea puede variar seg�n el tipo de impacto y/o elementos del ambiente que se vean afectados; para el caso particular se considera pertinente delimitar el AID de acuerdo con los linderos del predio.

El �rea de influencia indirecta del proyecto, es aquella en donde los impactos trascienden el espacio f�sico del proyecto (Parque Cementerio) y su infraestructura asociadas, es decir la zona externa al �rea de influencia directa, la cual se extiende hasta donde se podr�an manifestar tales impactos. [�]

198. Es m�s, en el numeral 1.3. del plan ibidem[61], la sociedad analiz� las sustancias org�nicas que tendr�an las aguas residuales y sostuvo que estas ser�an sometidas a tratamiento antes de ser infiltradas al suelo, de ah� que defini� los porcentajes reales de remoci�n de contaminantes org�nicos a trav�s de una caracterizaci�n en la que analiz� �temperatura, (..) pH, S�lidos Suspendidos Totales (SST), S�lidos Sedimentables (SSED), Demanda Bioqu�mica de Ox�geno (DBO), Demanda Qu�mica de Ox�geno (DQO) y Grasas y Aceites (Gy A)�.

199. En relaci�n con el sistema de vertimientos[62], Sercofun Los Olivos Ltda. identific� los eventos de riesgos por fallas f�sicas, en consideraci�n a que se tratan de sistemas convencionales y pre-fabricadas, lo que generar�a un colapso de las unidades de tratamiento, obstrucci�n de las v�as de evacuaci�n y corte del suministro de energ�a el�ctrica. Sin embargo, asegur� que la probabilidad de ocurrencia era muy baja por las siguientes razones:

[�] El nivel de vulnerabilidad a nivel ambiental en este caso es muy bajo. esto se debe al m�nimo nivel de complejidad y a la cantidad de elementos expuestos en el sitio de estudio. el medio posee una buena resistencia a los cambios y su capacidad para recuperarse se dan periodos de tiempo cortos.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que el grado de exposici�n de elementos propios del medio como lo son el agua y el suelo contin�an siendo sensibles a la afectaci�n por parte de los vertimientos, por tal motivo se asumir�n estos, como factores de riesgo dignos de ser analizados e intervenidos al momento de establecer las medidas de gesti�n del riesgo. [�]

200. Mencion� que, en la etapa de construcci�n de las instalaciones del Parque Cementerio, podr�a involucrarse �movimientos de tierra�, as� como �el buen funcionamiento de los sistemas de tratamiento de agua residual si no se construyen e instalan adecuadamente� cuando �la distribuci�n y construcci�n de estructuras en el �rea de influencia de los sistemas de vertimientos sin conocimiento de obra civil�[63].

201. Tambi�n identific� y valor� las amenazas externas en el sistema de vertimientos[64], as� como los sismos[65], y concluy� que el grado de exposici�n para el caso de la referencia era bajo. Adem�s, equipar� como riesgo el vertimiento de aguas no tratadas[66], frente a lo cual advirti� que la �materia org�nica� era la �nica sustancia de inter�s sanitario, que en todo caso sostuvo que el grado de vulnerabilidad era bajo. Sobre �los productos utilizados en el tratamiento de cad�veres y las sustancias producidas por personal administrativo y usuarios externos�, se�al� que no eran de inter�s sanitario[67]. En tal sentido, precis� lo siguiente:

[�] Para el caso particular y mostrando como escenario que los sistemas no puedan cumplir con su funci�n de tratamiento y que el vertimiento sea descargado directamente al suelo sin ser depurado, los contaminantes propios del efluente afectar�an de manera directa el suelo, subsuelo y los acu�feros cercanos; no obstante, dado que no existen sustancias t�xicas o de inter�s sanitario, el riesgo sobre el suelo no ser�a representativo.

(�) El nivel de vulnerabilidad a nivel ambiental en este caso es muy bajo, esto se debe al nivel de complejidad y a la cantidad de elementos expuestos en el sitio de estudio. El medio posee una buena resistencia a los cambios y su capacidad para recuperarse se da en periodos cortos. [�]

202. N�tese que, con el prop�sito de proteger las fuentes h�dricas, el proyecto contiene la siguiente propuesta de demarcaci�n de la faja forestal protectora de corriente h�drica denominada Quebrada Andahuarias:

[�] El predio donde se construir� el parque cementerio cuenta en la actualidad con una faja forestal protectora donde predomina el rastrojo, �rea que corresponde a 8.788 m2 de los 20.627 m2 que tiene actualmente la finca.

(�)La determinaci�n de las fajas forestales protectoras garantizar� la conservaci�n de dicha �rea, evitando la construcci�n de edificaciones dentro de ese per�metro permitiendo adem�s la proliferaci�n de la cobertura vegetal protectora-productora por regeneraci�n natural espont�nea; Asimismo y como parte del proyecto se establecer�n especies ornamentales propias de la zona en los l�mites de retiro con el fin de enriquecer la flora y conectar los corredores biol�gicos internos.

Se recomienda a la empresa SERCOFUN LOS OLIVOS, el tener en cuenta los usos permitidos para estas �reas seg�n el tipo de cauce (acuerdo 028 de 2011). [�]

203. En este orden, y luego de estudiar las pruebas que el titular del permiso aport� en sede administrativa, el Despacho observa que tal documentaci�n, prima facie, cumple con las exigencias previstas en los numerales 5� y 8� del art�culo 2.2.3.3.5.3. del Decreto 1076 de 2015.

204. En la Evaluaci�n Ambiental del Vertimiento, as� como en el Plan Gesti�n del Riesgo y Manejo de Vertimientos, Sercofun Los Olivos Ltda. valor� y predijo los impactos negativos en el suelo, as� como la incidencia del proyecto en la calidad de vida de los habitantes. Todos estos aspectos se valoraron en el concepto t�cnico n�mero 00207 del 5 de febrero de 2018[68], aclarado por el concepto t�cnico n�mero 00800 21 del 20 de marzo 2018[69] y a su vez modificado por el concepto t�cnico n�mero 001468 del 10 de mayo 2018[70].

205. En este punto, es necesario reiterar que la parte actora no aport� ning�n medio probatorio tendiente a desacreditar la veracidad o pertinencia de las conclusiones y datos contenidos en dicha documentaci�n.

206. Ahora bien, en segundo lugar, la junta de acci�n comunal demandante afirm� que la CARDER autoriz� el citado proyecto a pesar de que el cementerio est� ubicado junto a un barranco, lo que transgreder�a el art�culo 162 de la Ley 9 de 1979, conforme al cual: �Las edificaciones se localizar�n en lugares alejados de acequias, barrancos, de terrenos pantanosos, o que se inunden por el agua de mar�.

207. Sobre el particular, el Despacho observa que las estructuras del proyecto no est�n ubicadas en el sector catalogado como presuntamente riesgoso. El concepto t�cnico 00207 de 5 de febrero de 2018, elaborado por los funcionarios y contratistas de CARDER Guillermo Antonio Rinc�n Sanz[71], Alexandra Villegas Morales[72], Hugo Alberto Hincapi�[73], Ana Mar�a Mej�a Jim�nez[74], Rafael Augusto Pinzon Ossa[75] y Paola Holguin Giraldo[76], da cuenta de lo anterior en el siguiente apartado:

209. Los mapas anexos al proyecto tambi�n demuestran que ninguna infraestructura qued� proyectada al interior de la zona en �v� que hace parte de la faja forestal protectora de la quebrada Andahuaylas, tal y como puede observarse en la siguiente gr�fica:

210. En consecuencia, tampoco est� acreditado, hasta este momento procesal, el incumplimiento de lo dispuesto en el art�culo 162 de la Ley 9 de 1979. Adicionalmente, prima facie, tal asunto es de la �rbita de competencias de la autoridad territorial que evalu� el respectivo permiso de construcci�n.

211. En esa medida, en el plenario no est� acreditado que la Resoluci�n 0828 adolezca de falsa motivaci�n, expedici�n irregular o transgreda los art�culos 2�, 8�, 79 y 95 de la Constituci�n Pol�tica, los numerales 5� y 8� del art�culo 2.2.3.3.5.3. del Decreto 1076 de 2015 o el art�culo 162 de la Ley 9 de 1979. Por ello, para efectos de resolver el presente reparo ser� necesario continuar con el debate procesal, decretar y practicar las pruebas que sean conducentes, escuchar los alegatos de las partes, y adelantar las dem�s actuaciones propias de este medio de control.

212. El demandante sostiene que el cementerio est� ubicado en un lugar no autorizado por el Plan de Ordenamiento Territorial - POT de ese municipio, contraviniendo lo ordenado por el numeral 4� del art�culo 35 de la Resoluci�n 5194 de 2010[77].

213. En tal sentido, adujo que los cementerios deben estar alejados de industrias, actividades comerciales, viviendas, conjuntos residenciales y lugares de recreaci�n. Sin embargo, en la regi�n cercana del proyecto autorizado �se encuentran m�s de 50 viviendas y varios establecimientos de comercio y servicios�.

214. Sobre el particular, es importante se�alar que la Resoluci�n 5194 de 2010 reglament� la prestaci�n de los servicios de cementerios, inhumaci�n, exhumaci�n y cremaci�n de cad�veres, y precis� en su art�culo 35 que ese tipo de actividad debe cumplir con los siguientes requisitos:

[�]ART�CULO 35. REQUISITOS B�SICOS. Los cementerios deben reunir los siguientes requisitos: (�)

4. Ubicarse en los sitios destinados por el Plan de Ordenamiento Territorial �POT�, Esquema de Ordenamiento Territorial �EOT� y Plan B�sico de Ordenamiento Territorial � PBOT, del municipio o distrito,en todo caso alejados de industrias o actividades comerciales que produzcan olores desagradables o cualquier otro tipo de contaminaci�n, aislados de focos de insalubridad y separados de viviendas, conjuntos residenciales, lugares de recreaci�n, botaderos a cielo abierto, rellenos sanitarios, plantas de beneficio, plazas de mercado y colegios. (�)

6. Dentro del �rea interna enmarcada por el cerco perimetral, no deben existir otras edificaciones, industrias, instalaciones o viviendas, ajenas a la actividad propia de los cementerios y a su seguridad. [�]

215. En ese orden, el art�culo 2.2.5.1.7.4. del Decreto 1076 se�al� que el peticionario del permiso de emisiones, al momento de presentar su solicitud, debe aportar el concepto sobre uso del suelo que demuestre la compatibilidad entre la actividad u obra proyectada con el uso permitido. La aludida norma es del siguiente tenor:

[�] ART�CULO 2.2.5.1.7.4. Solicitud del permiso. La solicitud del permiso de emisi�n debe incluir la siguiente informaci�n: (�)

d) del establecimiento, obra o actividad, expedido por la autoridad municipal o distrital competente, o en su defecto, los documentos p�blicos u oficiales contentivos de normas y planos, o las publicaciones oficiales, que sustenten y prueben la compatibilidad entre la actividad u obra proyectada y el uso permitido del suelo; [�]

216. En virtud de lo anterior, en el expediente administrativo del proyecto obra el concepto de 3 de marzo de 2017, expedido por el Curador Urbano Primero de Pereira Orlando Bedoya Giraldo[78], seg�n el cual el uso del suelo del predio objeto de an�lisis �corresponde a suelo suburbano y suelo rural�. El citado documento indica lo siguiente:

[�] El predio de la consulta con ficha catastral 0007-0007-0080-000 se encuentran dos zonas de asignaci�n de usos del suelo las cuales corresponden a suelo suburbano y suelo rural.

217. Adicionalmente, ese documento tiene adjunta la �ficha normativa suelo rural corredor vial Pereira Armenia categor�as de desarrollo restringido CDR 03�, la cual registra la siguiente informaci�n:

�reas de suelo suburbano donde se presenta la vocaci�n y la tendencia de estos corredores para soportar actividades relacionadas con la log�stica servicios y comercio como apoyo a la din�mica de movilidad y a la apuesta de desarrollo y competitividad del municipio. (�)

�reas para la mezcla de actividades rurales con usos de baja densidad de servicios comercio alojamiento y actividades de apoyo al turismo.

El desarrollo de cualquier actividad se condiciona a las exigencias de la autoridad ambiental en cuanto a los otorgamientos ambientales (concesiones, permisos de vertimiento, ocupaciones de cauce, Permisos de emisiones atmosf�ricas, aprovechamientos forestales, entre otros).

En los suelos de protecci�n identificados al interior de estas �reas (Relictos De Bosque, Humedales, Zonas Forestales Protectoras) aplica la reglamentaci�n en cuanto a usos y aprovechamiento determinada por la Autoridad Ambiental

La siguiente es la asignaci�n de usos del suelo abre el corredor vial suburbano Pereira- Armenia. [�]

218. La �ficha normativa dezona de producci�n sostenible agroforestal� explica los siguientes usos del suelo autorizados:

Suelos que por sus caracter�sticas est�n definidos como de Producci�n Sostenible Agroforestal seg�n las Zonificaci�n ambiental de la CARDER

�reas destinadas a la producci�n silvoagr�cola y silvopastoril, donde se presentan cultivos permanentes, semipermanentes, anuales o transitorios, as� como pastos y forrajes con arreglos agroforestales acordes con las potencialidades y limitantes de los suelos.

219. Igualmente, en el plenario obra el oficio 33033 de 23 de julio de 2021[79], expedido por el Secretario de Planeaci�n[80] y la Subsecretaria de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano de Pereira[81], en cuyos ac�pites pertinentes se indica lo siguiente:

[�]En atenci�n a sus oficios PJAA-28-2021-0599 del 8 de junio de 2021 y PJAA-28-2021-0797 de 22 de julio de 2021, Expediente E-2021-279771, donde consulta a este despacho sobre la norma de Ordenamiento Territorial aplicable al predio identificado con ficha catastral No. 66001000700070080000 y Matricula Inmobiliaria No. 290-86726, donde seg�n las denuncias de la comunidad se pretende construir un cementerio, nos permitimos informar lo siguiente:

1. Una vez consultado el Portal Geogr�fico del Municipio de Pereira, se pudo identificar que el predio objeto de an�lisis se encuentra en su mayor �rea (13.174,03 m2 ) sobre el corredor vial suburbano Pereira - Armenia, y le es aplicable la ficha normativa CDR-03 y un �rea menor (5.013,54 m2 ) est�n en la Zona de Producci�n Sostenible Agroforestal de Producci�n Sostenible Agroforestal y le es aplicable la ficha normativa CP-08. La ficha normativa CDR-03, establece en su p�gina 6 que el uso ES4 denominado "Cementerios, Parques Cementerios, Hornos Crematorios" es permitido pero "Restringido a cumplimiento criterios de implantaci�n y mitigaci�n de impactos", adem�s se indica que "Los usos aqu� establecidos est�n condicionados a las restricciones que impone las reglamentaciones de declaratoria de agotamiento del recurso h�drico expedida por las autoridades ambientales y la Comisi�n conjunta que ordenan la Cuenca del R�o La Vieja".

Por otro lado, la ficha normativa CP-08 no permite el uso ES4 denominado "Cementerios, Desarrollo Urbano -- Parques Cementerios, Hornos Crematorios".

2. El predio tiene en su frente una peque�a �rea de suelos de protecci�n del recurso h�drico (1.013,47 m2 ) y al fondo se observan �reas forestales protectoras no asociadas a corrientes h�dricas Asociadas a pendientes mayores al 70% (4.117,03 m2 ) [�]

220. Como puede observarse, ambos documentos coinciden en se�alar que el predio cuenta dos tipos de suelo, a saber: desarrollo restringido del suelo rural y suelo rural.

221. En el suelo suburbano de la categor�a de �desarrollo restringido del Suelo Rural� las actividades de �servicios funerarios� (S13) y �cementerios, parques cementerios y hornos crematorios� (ES4) est�n autorizadas como uso condicionado. Esto significa que la actividad puede desarrollarse en este territorio cumpliendo las exigencias previstas por la autoridad ambiental; exigencias que, en el caso concreto, aparecen consignadas en la Resoluci�n 0828 de 2018.

222. Ahora bien, en la categor�a de protecci�n del suelo rural, no est�n autorizadas las anteriores actividades de cremaci�n y velaci�n, pero las mismas si son compatibles con el uso del suelo Forestal Protector o para recreaci�n pasiva.

223. En este contexto, cabe recordar que el proyecto autorizado no solo contempla la construcci�n de un parque cementerio, pues -en su interior-, el �rea de 8.788 m2 de los 20.627 m2 que tiene de extensi�n, est� catalogada como faja forestal protectora de la quebrada Andahuaylas.

224. Lo anterior significar�a que, en principio, el proyecto cumple con el uso del suelo autorizado por el Plan de Ordenamiento Territorial - POT de Pereira, resaltando el hecho consistente en que la parte actora tampoco alleg� ning�n medio demostrativo que permita afirmar que las obras del cementerio sobrepasan el territorio catalogado como suelo rural.

225. Ahora bien, frente a la afirmaci�n consistente en que los cementerios deben estar alejados de industrias, actividades comerciales, viviendas, conjuntos residenciales y lugares de recreaci�n, en los t�rminos del numeral 4� del art�culo 35 de la Resoluci�n 5194 de 2010, es importante precisar que en plenario no obra el material probatorio requerido para verificar si tal supuesto se configura en el caso objeto de estudio.

226. N�tese que el Plan de Ordenamiento Territorial de Pereira vigente al momento de la expedici�n del acto, no es un documento que repose en el expediente judicial. Dicha norma local ser� la que precise los criterios t�cnicos de distanciamiento[82].

227. Adem�s, como ya se mencion� en el apartado III.4.1.2 de este prove�do, el valor probatorio de las fotograf�as y los registros de Google maps que present� el demandante requieren de la confrontaci�n con otros medios de prueba complementarios. En otras palabras, este aspecto f�ctico debe resolverse con el apoyo t�cnico de un auxiliar de la justicia que verifique la veracidad de tales asuntos.

228. El Despacho pone de presente que, en la actuaci�n administrativa, obra el oficio de 23 de octubre de 2018, suscrito por el se�or H�ctor Hincapi� Garc�a, en su calidad de representante legal de Sercofun Los Olivos Ltda., en donde se afirma que el proyecto cuestionado cumple con los par�metros previstos en el POT de Pereira vigente al momento de la expedici�n de la Resoluci�n 0828. La comunicaci�n se�ala lo siguiente:

[�]ACTIVIDADES RELACIONADAS CON CEMENTERIOS, PARQUES CEMENTERIOS, HORNOS CREMATORIOS Y OSARIOS. (ES4).

Son servicios destinados a la recepci�n temporal o permanente de cad�veres, a trav�s de b�vedas en superficie y/o elevadas o alojados bajo la superficie del terreno. Si el servicio de entierro se da �nicamente por debajo de la superficie natural del terreno, se clasificar� como Parque - Cementerio o Jard�n - Cementerio; En caso contrario, se denominar� simplemente Cementerio. Tambi�n puede haber un servicio mixto que presente ambas condiciones. Estos servicios pueden estar provistos de homos crematorios y osarios.

229. Por todo lo anterior, tal y como aconteci� frente a los reparos 3 y 4, al estudiar los cargos cuarto y quinto tampoco es posible acceder a la solicitud de medida cautelar deprecada, puesto no obran en el expediente las pruebas que permitan resolver las dudas existentes. Por ello, el Despacho negara la solicitud de suspensi�n provisional en tanto la parte actora no demostr� en esta etapa inicial que el proyecto quebrante el numeral 4� del art�culo 35 de la Resoluci�n 5194 de 2010.

III.4.5. Del octavo reparo respecto de la generaci�n de olores ofensivos en zonas residenciales o habitadas

230. La Junta de Acci�n Comunal de la Vereda Pajares de Condina aleg� que la actividad autorizada produce olores ofensivos en zonas residenciales, lo que transgrede el art�culo 2.2.5.1.3.4. del Decreto 1076 de 2015 y el art�culo 5� de la Resoluci�n 1541 de 2013.

231. A efectos de resolver, es necesario poner de presente que el art�culo 2.2.5.1.3.4 proh�be expl�citamente �el funcionamiento de establecimientos generadores de olores ofensivos en zonas residenciales�. Y agrega que: �las Autoridades Ambientales competentes y en especial los municipios y distritos, determinar�n las reglas y condiciones de aplicaci�n de las prohibiciones y restricciones al funcionamiento, en zonas habitadas y �reas urbanas, de instalaciones y establecimientos industriales y comerciales generadores de olores ofensivos, as� como las que sean del caso respecto al desarrollo de otras actividades causantes de olores nauseabundos�.

232. En armon�a con lo anterior, el art�culo 2.2.5.1.2.3 del Decreto 1076 atribuy� al Ministerio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADS) la competencia para establecer los umbrales de tolerancia de los olores ofensivos y los procedimientos para determinar el nivel permisible de tales sustancias.

233. En ejercicio de esa competencia, a trav�s de la Resoluci�n 1541 de 2013[83], el MADS expidi� las reglas para la recepci�n de quejas por olores ofensivos, los niveles permisibles de calidad del aire o de inmisi�n y el m�todo de evaluaci�n de aquellas emisiones.

234. As�, el art�culo 4 de la Resoluci�n 1541 fij� cu�l ser�a el procedimiento a efectos de determinar si una actividad requer�a de un Plan para la Reducci�n del Impacto por Olores Ofensivos (PRIO), a trav�s de las siguientes etapas:

[�]ART�CULO 4o. RECEPCI�N DE QUEJAS. Para la recepci�n de quejas por olores ofensivos, se aplicar� el siguiente procedimiento:

1. Una vez radicada la queja, la autoridad ambiental competente contar� con treinta (30) d�as h�biles para la evaluaci�n de la misma y dentro del mismo t�rmino podr� practicar una visita a la actividad.

2. Vencido el plazo anterior, la autoridad ambiental competente contar� con treinta (30) d�as calendario para expedir el acto administrativo mediante el cual se pronunciar� sobre la viabilidad o no de exigir a la actividad la presentaci�n de un Plan para la Reducci�n del Impacto por Olores Ofensivos (PRIO).

3. Dentro de los tres (3) meses siguientes a la firmeza del acto administrativo, el titular de la actividad deber� presentar un Plan para la Reducci�n del Impacto por Olores Ofensivos, (PRIO), de conformidad con lo establecido en el Cap�tulo V de la presente resoluci�n.

PAR�GRAFO 1o. Para la evaluaci�n de la queja, la autoridad ambiental competente seguir� el procedimiento establecido en el Protocolo para el Monitoreo, Control y Vigilancia de Olores Ofensivos. [�]

235. Su art�culo 5� enlist� -de forma no taxativa- las sustancias de olores ofensivos por actividad, en los siguientes t�rminos:

236. Tambi�n indic� cuales eran los niveles permisibles de calidad del aire o de inmisi�n para sustancias de olores ofensivos a condiciones de referencia (25�C y 760 mm Hg). Y, en su art�culo 7�, determin� que la evaluaci�n del cumplimiento de los niveles de calidad del aire o de inmisi�n de sustancias o mezclas de sustancias de olores ofensivos, se realizar�a mediante la medici�n directa de sustancias o mezclas de sustancias.

237. En este contexto normativo, es pertinente precisar que el lugar en donde se ubica el proyecto objeto de la litis no ha sido catalogado como zona residencial, tal y como se observa en la �ficha normativa suelo rural corredor vial Pereira Armenia categor�as de desarrollo restringido CDR 03�, y seg�n lo consignado en la �ficha normativa de zona de producci�n sostenible agroforestal�, adjuntas al concepto de 3 de marzo de 2017, expedido por el Curador Urbano Primero de Pereira Orlando Bedoya Giraldo.

238. En el plenario tampoco obra prueba que acredite el incumplimiento de �las reglas y condiciones� que hayan determinado �las Autoridades Ambientales competentes y en especial los municipios y distritos� en cuanto al funcionamiento de instalaciones generadores de olores ofensivos en �zonas habitadas y �reas urbanas�.

239. Cabe resaltar que solo es posible evaluar el cumplimiento de esos est�ndares, a trav�s de la medici�n directa de las sustancias o mezclas de sustancias. Por esta raz�n es que la autoridad ambiental competente eval�a los par�metros de olores ofensivos a partir de una queja. En este orden de ideas, aunque el proyecto tenga contemplada la construcci�n de una planta de tratamiento de aguas residuales y no residuales, y cuente adem�s con una fuente de emisi�n de �material Particula (MP), Mon�xido de Carbono (CO), Hidrocarburos totales (HCt) y Sumatoria de Benzapineos y Dibenzoantracenos (HAPs)�, lo cierto es que mientras esa infraestructura no entre en operaci�n, y los interesados presenten la respectiva queja, la autoridad ambiental t�cnicamente no podr� evaluar el cumplimiento de los par�metros a que se refiere la Resoluci�n 1541, ni ordenar la adopci�n de un Plan para la Reducci�n del Impacto por Olores Ofensivos (PRIO).

240. Es m�s, como se se�al� en el ac�pite III.4.1. de esta providencia, Sercofun Los Olivos Ltda. hizo una predicci�n y valoraci�n de los impactos directos e indirectos que pueden derivarse de los vertimientos dom�sticos y no dom�sticos en el suelo[84] afirmando que:

241. De acuerdo con lo anterior, esta Sala considera en esta etapa procesal no se prob� que el acto administrativo demandado desconozca el art�culo 2.2.5.1.3.4. del Decreto 1076 de 2015 o el art�culo 5� de la Resoluci�n 1541 de 2013, por las razones expuestas.

242. La demandante sugiri� que el caso deb�a resolverse a la luz del principio de precauci�n, seg�n lo dispuesto en los art�culos 1� (numerales 6 y 11) y 31 de la Ley 99 de 1993.

243. Para resolver es necesario traer a colaci�n la sentencia C-703 de 6 de septiembre de 2010[85], en la que la Corte Constitucional abord� cu�l es la distinci�n existente entre los principios de prevenci�n y precauci�n, a partir de las siguientes consideraciones:

[�] Trat�ndose de da�os o de riesgos se afirma que en algunos casos es posible conocer las consecuencias que tendr� sobre el ambiente el desarrollo de determinado proyecto, obra o actividad, de modo que la autoridad competente puede adoptar decisiones antes de que el riesgo o el da�o se produzcan, con la finalidad de reducir sus repercusiones o de evitarlas y cuando tal hip�tesis se presenta operael principio de prevenci�n que se materializa en mecanismos jur�dicos tales como la evaluaci�n del impacto ambiental o el tr�mite y expedici�n de autorizaciones previas, cuyo presupuesto es la posibilidad de conocer con antelaci�n el da�o ambiental y de obrar, de conformidad con ese conocimiento anticipado, a favor del medio ambiente.

El previo conocimiento que caracteriza al principio de prevenci�n no est� presente en el caso delprincipio de precauci�n o de cautela, pues trat�ndose de �ste el riesgo o la magnitud del da�o producido o que puede sobrevenir no son conocidos con anticipaci�n, porque no hay manera de establecer, a mediano o largo plazo, los efectos de una acci�n, lo cual por ejemplo, tiene su causa en los l�mites del conocimiento cient�fico que no permiten adquirir la certeza acerca de las precisas consecuencias de alguna situaci�n o actividad, aunque se sepa que los efectos son nocivos. [�] [subraya y destaca la Sala].

244. N�tese que la presente controversia es de aquellas en donde es posible conocer las consecuencias que tendr� sobre el ambiente el desarrollo del proyecto del Parque Cementerio acusado, lo que significa que el principio de precauci�n, prima facie, no tendr�a cabida en el caso concreto.

245. En tal sentido debe resaltarse que este debate judicial gira en torno a determinar si los estudios ambientales que eval�an el riesgo y el nivel de da�o ambiental son errados o incompletos, y si la autoridad competente adopt� sus decisiones sin contar con los elementos cient�ficos necesarios para resolver el caso; materias estas relacionadas con el principio de prevenci�n y no con el de precauci�n. De all� que la incertidumbre cient�fica a que alude el demandante cesa cuando el peticionario cumple con su deber estudiar las condiciones en las que se llevar�a a cabo la actividad de vertimientos de aguas dom�sticas y no dom�sticas, as� como tambi�n las de emisiones atmosf�ricas.

246. Con base en lo anterior, el Despacho considera improcedente el argumento asociado al desconocimiento del principio de precauci�n expuesto por la parte actora como fundamento de su petici�n cautelar.

247. En su ultim� reparo, la Junta de Acci�n Comunal de la Vereda Pajares de Condina aleg� que el proyecto autorizado generar�a residuos peligrosos que pueden afectar la salud, seg�n lo se�alado en los numerales 3 y 4.2.1. de la Resoluci�n 01164 de 2002.

248. Frente a este argumento, el Despacho pone de relieve que el ordenamiento jur�dico colombiano prev� un modelo de desarrollo sostenible y no puramente conservacionista[86]. Por ende, si se considera que el Plan de Gesti�n Integral de Residuos Hospitalarios y Similares � PGIRHS que aprob� la CARDER, presentaba deficiencias t�cnicas, la parte actora debi� fundamentar sus consideraciones en pruebas y en argumentos espec�ficos.

249. Debe recordarse que para la declaratoria de la suspensi�n provisional de los efectos jur�dicos de un acto administrativo resulta necesario que se acredite la apariencia de buen derecho de la petici�n y el prejuicio irremediable, aspecto que no acredit� la parte actora en esta etapa inicial de la controversia.

114. Por todo lo anterior, el Despacho negar� la solicitud de suspensi�n provisional de los efectos jur�dicos de la Resoluci�n 828 de 22 de diciembre de 2018.

115. Finalmente, no sobra resaltar que este an�lisis preliminar, como bien lo contempla el inciso 2� del art�culo 229 del C�digo de Procedimiento Administrativo y de lo Contencioso Administrativo, no constituye prejuzgamiento y, en esa medida, tales interpretaciones normativas iniciales, no sujetan la decisi�n definitiva que ser� adoptada en su momento por la Sala.

En m�rito de lo expuesto, el Consejero de Estado de la Secci�n Primera de lo Contencioso Administrativo,

PRIMERO: NEGAR la solicitud de suspensi�n provisional de los efectos jur�dicos de la Resoluci�n 828 de 22 de mayo de 2018, expedida por la Corporaci�n Aut�noma Regional de Risaralda -CARDER, por las razones expuestas en esta providencia.

[1] �Por el cual otorga permiso de vertimiento de aguas residuales dom�sticas y no dom�sticas, se aprueban los dise�os del sistema de tratamiento de aguas residuales dom�sticas y no dom�sticas, se aprueba la demarcaci�n de suelos de protecci�n, se otorga un permiso de emisiones atmosf�ricas, sea aprueba un plan de gesti�n integral de residuos peligrosos y se dictan otras disposiciones�

[4] �Por la cual se reglamenta la prestaci�n de servicios de cementerios, inhumaci�n, exhumaci�n y cremaci�n de cad�veres�

[5] �Por la cual se establecen las normas y est�ndares de emisi�n admisibles de contaminantes a la atm�sfera por fuentes fijas y se dictan otras disposiciones.�

[6] �Por la cual se ajusta el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas, adoptado a trav�s de la Resoluci�n 760 de 2010 y se adoptan otras disposiciones�

[7] �Por la cual se reglamenta la prestaci�n de servicios de cementerios, inhumaci�n, exhumaci�n y cremaci�n de cad�veres�

[8] �Por la cual se reglamenta la prestaci�n de los servicios de cementerios, inhumaci�n, exhumaci�n y cremaci�n de cad�veres�.

[9] Mediante auto de 30 de junio de 2021. �ndice Nro. 5 del expediente digital Samai.

[14] Providencia de 17 de marzo de 2015, Expediente n�m. 2014-03799, consejera ponente: doctora Sandra Lisset Ibarra V�lez.

[15] Sobre la aplicaci�n de la proporcionalidad, la misma providencia indic�: �Se ha sostenido en anteriores ocasiones: (�) All� donde el Juez Administrativo no est� gobernado por reglas, lo m�s posible es que la actuaci�n se soporte en principios o mandatos de optimizaci�n, luego la proporcionalidad y ponderaci�n no son metodolog�as extra�as en la soluci�n de conflictos y en la reconducci�n de la actividad de la jurisdicci�n contencioso administrativa al cumplimiento material de los postulados del Estado social de derecho. En todo caso, la proporcionalidad y la ponderaci�n no representan ni la limitaci�n, ni el adelgazamiento de los poderes del juez administrativo, sino que permiten potenciar la racionalidad y la argumentaci�n como sustento de toda decisi�n judicial. Cabe, entonces, examinar c�mo se sujeta la actividad discrecional del juez administrativo a las reglas de la ponderaci�n, como expresi�n m�s depurada del principio de proporcionalidad� // En consecuencia, la observancia de este razonamiento tripartito conlleva a sostener que en la determinaci�n de una medida cautelar, que no es m�s que la adopci�n de una medida de protecci�n a un derecho en el marco de un proceso judicial, el Juez debe tener en cuenta valoraciones de orden f�ctico referidas a una estimaci�n de los medios de acci�n a ser seleccionados, cuesti�n que implica i) que la medida decretada sea adecuada para hacer frente a la situaci�n de amenaza del derecho del afectado (idoneidad); ii) que, habida cuenta que se trata de una decisi�n que se adopta al inicio del proceso judicial o, inclusive, sin que exista un proceso formalmente establecido, la medida adoptada sea la menos lesiva o invasora respecto del marco competencial propio de la administraci�n p�blica (necesidad) y, por �ltimo, es necesario iii) llevar a cabo un razonamiento eminentemente jur�dico de ponderaci�n , en virtud del cual se debe determinar de manera doble el grado de afectaci�n o no satisfacci�n de cada uno de los principios contrapuestos�.

[16] El art�culo 230 del CPACA. se�ala que el Juez puede decretar, cuando haya lugar a ello, �una o varias de las siguientes� cautelas: ordenar que se mantenga una situaci�n, o se restablezca el estado de cosas anterior a la conducta �vulnerante o amenazante�, cuando fuere posible (numeral 1); suspender un procedimiento o actuaci�n administrativa, incluso de car�cter contractual, dentro de ciertas condiciones (numeral 2); suspender provisionalmente los efectos de un acto administrativo (numeral 3); ordenar que se adopte una decisi�n, o la realizaci�n o demolici�n de una obra con el objeto de evitar o prevenir un perjuicio o la agravaci�n de sus efectos; (numeral 5) Impartir �rdenes o imponerle a cualquiera de las partes del proceso obligaciones de hacer o no hacer.

[17] �[�] Art�culo 231. Requisitos para decretar las medidas cautelares. Cuando se pretenda la nulidad de un acto administrativo, la suspensi�n provisional de sus efectos proceder� por violaci�n de las disposiciones invocadas en la demanda o en la solicitud que se realice en escrito separado, cuando tal violaci�n surja del an�lisis del acto demandado y su confrontaci�n con las normas superiores invocadas como violadas o del estudio de las pruebas allegadas con la solicitud. Cuando adicionalmente se pretenda el restablecimiento del derecho y la indemnizaci�n de perjuicios deber� probarse al menos sumariamente la existencia de los mismos.

En los dem�s casos, las medidas cautelares ser�n procedentes cuando concurran los siguientes requisitos:

2. Que el demandante haya demostrado, as� fuere sumariamente, la titularidad del derecho o de los derechos invocados.

b) Que existan serios motivos para considerar que de no otorgarse la medida los efectos de la sentencia ser�an nugatorios [�]�.

[18] Providencia citada ut supra, consejero ponente: doctor Jaime Orlando Santofimio Gamboa.

[19] Consejo de Estado, Sala de lo Contencioso Administrativo, Secci�n Primera. Auto de 19 de junio de 2020. Radicaci�n: 11001032400020160029500. MP.: Hernando S�nchez S�nchez. Actor; RCN Televisi�n S.A. y Caracol Televisi�n S.A.

[20] �Por la cual se reglamenta la prestaci�n de servicios de cementerios, inhumaci�n, exhumaci�n y cremaci�n de cad�veres�

[21] �Por la cual se establecen las normas y est�ndares de emisi�n admisibles de contaminantes a la atm�sfera por fuentes fijas y se dictan otras disposiciones.�

[22] �Por la cual se ajusta el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas, adoptado a trav�s de la Resoluci�n 760 de 2010 y se adoptan otras disposiciones�

[23] CONSEJO DE ESTADO. SALA DE LO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO. SECCI�N PRIMERA. Consejero ponente: ROBERTO AUGUSTO SERRATO VALD�S. Bogot�, D.C., veintiocho (28) de febrero de dos mil veinte (2020). Radicaci�n n�mero: 11001-03-24-000-2018-00393-00.

[24] Folio 21 y 22 del Expediente Administrativo 5944 Tomo 2. �ndice Nro. 15 del expediente digital Samai.

[25] Folio 44 de la Contestaci�n de la demanda de Sercofun Ltda. �ndice Nro. 22 del expediente digital Samai.

[26] �POR LA CUAL SE MODIFICA PARCIALMENTE LA RESOLUCION CARDER N�MERO 0828 DEL 22 DE MAYO DEL 2018 �POR LA CUAL SE OTORGA PERMISO DE VERTIMIENTOS DE AGUAS RESIDUALES DOM�STICAS Y NO DOM�STICAS, SE APRUEBAS LOS DISE�OS DEL SISTEMA DE TRATAMIENTO DE AGUAS RESIDUALES DOM�STICAS Y NO DOM�STICAS, SE APRUEBA LA DEMARCACI�N DE SUELOS DE PROTECCI�N, SE OTORGA UN PERMISO DE EMISIONES ATMOSF�RICAS, SE APRUEBA UN PLAN DE GESTI�N INTEGRAL DE RESIDUOS PELIGROSOS� Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES�. Pagina 450 Expediente administrativo anexo como prueba en Samai.

[27] [�] ART�CULO 91. P�RDIDA DE EJECUTORIEDAD DEL ACTO ADMINISTRATIVO. Salvo norma expresa en contrario, los actos administrativos en firme ser�n obligatorios mientras no hayan sido anulados por la Jurisdicci�n de lo Contencioso Administrativo. Perder�n obligatoriedad y, por lo tanto, no podr�n ser ejecutados en los siguientes casos:

[28] OSSORIO, Manuel, Diccionario de Ciencias Jur�dicas, Pol�ticas y Sociales, Ed. Heliasta, Buenos Aires, 1981, p. 241.

[29] Consejo de Estado. Sala de lo Contencioso Administrativo. Secci�n Cuarta. Auto del 29 de enero de 2014. Radicaci�n: 11001-03-27-000-2013-00014-00 (20066). M.P. Jorge Octavio Ram�rez Ram�rez. Actor: Mario Felipe Tovar Arag�n.

[31] Al respecto, ver la sentencia de 8 de junio de 2017, proferida por la Secci�n Primera del Consejo de Estado (Rad. N.� 88001-23-33-000-2014-00040-01(AP), en la que se�al� lo siguiente: �[�]En este sentido, el ambiente sano es un derecho colectivo, no solo por su pertenencia al cap�tulo 3 T�tulo II de la Constituci�n, que se refiere a los derechos colectivos y del ambiente, sino por cuanto su contenido es tal que no puede ser asignado a ninguna persona en particular. [�]la protecci�n del medio ambiente ha adquirido en nuestra Constituci�n un car�cter de objetivo social, [�] �La defensa del medio ambiente constituye un objetivo de principio dentro de la actual estructura de nuestro Estado Social de Derecho.

Adem�s, esta secci�n ha hecho alusi�n a las distintas dimensiones de este derecho, destacando que ostenta la calidad de: �[�] (i) derecho fundamental (por encontrarse estrechamente ligado con los derechos fundamentales a la vida y a la salud); (ii) de derecho-deber (todos son titulares del derecho a gozar de un ambiente sano pero, adem�s, tienen la obligaci�n correlativa de protegerlo); (iii) de objetivo social (conservaci�n de las condiciones del medio ambiente para garantizar el aprovechamiento de los recursos naturales por parte de las generaciones presentes y futuras); (iv) de deber del Estado (conservaci�n del medio ambiente, eficiente manejo de los recursos, educaci�n ambiental, fomento del desarrollo sostenible, e imposici�n las sanciones a que haya lugar); y (v) de derecho colectivo, de conformidad con lo previsto en el art�culo 88 superior [�]�(Rad. 76001-23-31-000-2011-01300-01(AP).

[32] Por la cual se adopta el Protocolo para el Control y Vigilancia de la Contaminaci�n Atmosf�rica Generada por Fuentes Fijas.

[34] Los documentos no se�alan quien elabor� los an�lisis, m�s all� de indicar que los estudios son de la Sociedad SERCOFUN LOS OLIVOS LTDA.

[35] Ingeniero Civil Profesional especializado de la Subdirecci�n de Gesti�n Ambiental Sectorial

[36] Administradora ambiental. Contratista de la Subdirecci�n de Gesti�n Ambiental Sectorial

[38] Administradora ambiental. Contratista de la Subdirecci�n de Gesti�n Ambiental Sectorial

[39] Ingeniero Sanitario. Profesional especializado de la Subdirecci�n de Gesti�n Ambiental Sectorial

[40] Administradora ambiental. Contratista de la Subdirecci�n de Gesti�n Ambiental Sectorial

[41] Consejo de Estado Secci�n Tercera, Sentencia 05001233100020030399301 (44494), Feb.15/18.

[44] Radicaci�n: 11001032400020180047000, demandantes: UCB PHARMA S.A. Y LABORATORIOS BIOPAS S.A.

[45] Expediente: 11001032400020180028900, Actor: JUAN CARLOS SALAZAR TORRES Y GUIDO ALEJANDRO MACHADO PEL�EZ

[46] Expediente: 11001-0324-000-2019-00478-00, Actor: GUSTAVO ADOLFO GALL�N GIRALDO Y JUAN CARLOS OSPINA REND�N

[47] CONSEJO DE ESTADO, SECCION QUINTA, Consejero ponente: ALBERTO YEPES BARREIRO, sentencia de 18 de septiembre de 2012, Radicaci�n n�mero: 11001-03-28-000-2012-00049-00

[48] CONSEJO DE ESTADO, SECCION QUINTA, Consejero ponente: LUCY JEANNETTE BERMUDEZ BERMUDEZ, sentencia de 17 de marzo de 2016, Radicaci�n n�mero: 76001-23-33-000-2015-01577-01

[49]CONSEJO DE ESTADO, SECCION QUINTA, Consejero ponente: ALBERTO YEPES BARREIRO, sentencia de 18 de septiembre de 2012, Radicaci�n n�mero: 11001-03-28-000-2012-00049-00

[50] En el precedente de 17 de marzo de 2016, la Secci�n Quinta consider� lo siguiente: [�] De conformidad con lo expuesto, la Sala observa que existe una contradicci�n entre las noticias de prensa obrantes en el expediente, valoradas de conformidad con lo dicho por la jurisprudencia rese�ada y las pruebas documentales remitidas por la Subsecretar�a de Recursos Humanos de la Gobernaci�n, �stas �ltimas gozan de una mayor credibilidad por ser un documento p�blico que hace fe de las declaraciones all� contenidas, seg�n lo dispuesto en el art. 257 del CGP. (�)

As� pues, la eventual o posible disconformidad que a juicio de la parte actora puede haber en el desarrollo de los hechos de nombramiento y posesi�n de la pariente del Concejal ser� asunto objeto de prueba y de cumplimiento de la carga probatoria acuciosa por parte de los sujetos procesales o del impulso procesal que le corresponde al juez en b�squeda de la verdad. [�]

[59] Folio 82 expediente tomo I. �ndice Nro. 15 expediente electr�nico Samai.

[60] Folio 144 expediente 5944 tomo 1. �ndice Nro. 15 del expediente digital de Samai

[61] Folio 147 expediente 5944 tomo 1. �ndice Nro. 15 del expediente digital de Samai

[62] Folios 153 expediente 5944 tomo 1. �ndice Nro. 15 del expediente digital de Samai

[63] Folio 157 expediente 5944 tomo 1. �ndice Nro. 15 del expediente digital de Samai

[64] Folio 157 expediente 5944 tomo 1. �ndice Nro. 15 del expediente digital de Samai

[65] Folio 161 expediente 5944 tomo 1. �ndice Nro. 15 del expediente digital de Samai

[66] Folio 169 expediente 5944 tomo 1. �ndice Nro. 15 del expediente digital de Samai

[67] Folio 172 expediente 5944 tomo 1. �ndice Nro. 15 del expediente digital de Samai

[68] Elaborado por los funcionarios y contratistas de CARDER Guillermo Antonio Rinc�n Sanz, Alexandra Villegas Morales, Hugo Alberto Hincapi�, Ana Mar�a Mej�a Jim�nez, Rafael Augusto Pinzon Ossa y Paola Holguin Giraldo.

[69] Elaborado por los funcionarios de CARDER Rafael Augusto Pinzon Ossa y Paola Holguin Giraldo.

[70] Elaborado por los funcionarios de CARDER Rafael Augusto Pinzon Ossa y Paola Holguin Giraldo.

[71] Ingeniero Civil Profesional especializado de la Subdirecci�n de Gesti�n Ambiental Sectorial

[72] Administradora ambiental. Contratista de la Subdirecci�n de Gesti�n Ambiental Sectorial

[74] Administradora ambiental. Contratista de la Subdirecci�n de Gesti�n Ambiental Sectorial

[75] Ingeniero Sanitario. Profesional especializado de la Subdirecci�n de Gesti�n Ambiental Sectorial

[76] Administradora ambiental. Contratista de la Subdirecci�n de Gesti�n Ambiental Sectorial

[77] �Por la cual se reglamenta la prestaci�n de los servicios de cementerios, inhumaci�n, exhumaci�n y cremaci�n de cad�veres�.

[78] Folio 28 expediente 5944 tomo 2. �ndice Nro. 15 expediente administrativo de Samai.

[82] Tal prueba deber� decretarse de oficio dado que no est� publicada en su totalidad en la p�gina web del ente territorial.

[83] , Por la cual se establecen los niveles permisibles de calidad del aire o de inmisi�n, el procedimiento para la evaluaci�n de actividades que generan olores ofensivos y se dictan otras disposiciones.

[84] Folio 82, 144, 147, 150, 169 y 172 expediente 5944 tomo I. �ndice Nro. 15 expediente electr�nico Samai. Evaluaci�n Ambiental del Vertimiento.

[86] MP Gloria Stella Ortiz Delgado. SPV y AV Mar�a Victoria Calle Correa; SPV y AC Alejandro Linares Cantillo; SPV y AV Gabriel Eduardo Mendoza Martelo.

[87] CONSTANCIA: La presente providencia fue firmada electr�nicamente por el Magistrado Ponente en la Sede Electr�nica para la Gesti�n Judicial del Consejo de Estado -SAMAI-. En consecuencia, se garantiza la autenticidad, integridad, conservaci�n y posterior consulta, de conformidad con el art�culo 186 del CPACA.

Referencia:	Medio de control de nulidad
Expediente:	11001-03-24-000-2021-00290-00
Actora:	Junta de Acci�n Comunal de la Vereda Pajares de Condina
Demandada:	Corporaci�n Aut�noma Regional de Risaralda - CARDER
Tercero: Tema:	Sercofun Los Olivos Ltda. Niega suspensi�n provisional de la Resoluci�n 828 de 22 de mayo de 2018

*Instalaci�n*	*Promedio*	*Est�ndares de Emisi�n Admisibles (mg/m3)*
		MP	CO	*HCT*
Hornos crematorios	Promedio diario	NO APLICA	75	15
Promedio horario		50	150	30

Par�metros de seguimiento emisiones atmosf�rica (laboratorio ADA de Bogot�)	Registro	Norma R/909/08	Conformidad
Emisi�n MP mg/m3 al 11% de O2	41.0	50	Conforme
Emisi�n CO mg/m3 al 11% de O2	0.2	150	Conforme
Emisi�n HCT mg/m3 al 11% de O2	0.00013	30	Conforme
Emisi�n dibenzo(a) pierno+dibenzo(a) antraceno mg/m3 al 11% de O2	0.07131	0.1	Conforme

Indicador	Fuente
	Horno crematorio
GPS	N: 4452352 W: -75404139
Altura sobre el nivel del mar (m)	1451 +- 3
Combustible	Gas natural
Consumo (m3 / servicio*)	22
presi�n barom�trica mm Hg	637
Di�metro (m)	0.46
Altura chimenea (m)	16.1
Temperatura 1era C�mara de combusti�n (T1era CC) Celsius	760
Temperatura 2da C�mara de combusti�n (T1era CC) Celsius	930
Temperatura chimenea (Ts) Celsius	243
velocidad salida gas (Vs) m/s	6.9
caudal de los gases (qs) (m3/min)	0.9
porcentaje de humedad del gas (%)	12.6
Ox�geno (O2) en la chimenea (%)	11.3
Par�metros de seguimiento emisiones atmosf�rica	registro	norma	conformidad
Emisi�n MP mg/m3 al 11% de O2	41.0	50	conforme
Emisi�n CO mg/m3 al 11% de O2	0.2	150	conforme
Emisi�n HCT mg/m3 al 11% de O2	0.00013	30	conforme
Emisi�n dibenzo(a) pierno+dibenzo(a) antraceno mg/m3 al 11% de O2	0.07131	0.1	conforme

Par�metros	Unidades	Resultados
GYA	mg/l	136,4
COLOR	mg/l	5
CONDUCTIVIDAD	mg/l	400
DBO�s	p5/cm	193
DQO	mg/l	780,3
SAAM	mg/l	<0,20
FENOLES	mg/l	<0,20
MERCURIO	mg/l	<0,002
SSED	mg/l	<0,1
SST	mg/l	40,5

Fecha Providencia	08/04/2022
Fecha de notificaci�n	08/04/2022

Tipo de zanja	N� de Ramales	Longitud por Ramal (m)
Espina de pescado	8	30
Espina de pescado	2	12
Total	10	264

Cauce intervenido por operaci�n del parque cementerio	No se interviene directamente una corriente de agua superficial
Corrientes de agua asociadas	Quebrada Andahuarlas

Procesamiento y conservaci�n de carne, pescado, crust�ceos y moluscos	Azufre Total Reducido (TRS)
Fabricaci�n de productos de la refinaci�n del petr�leo	Azufre Total Reducido (TRS) <1> Amon�aco (NH3)
Fabricaci�n de pulpas (pastas) celul�sicas; papel y cart�n	Azufre Total Reducido (TRS)
Curtido y recurtido de cueros; recurtido y te�ido de pieles	Sulfuro de hidr�geno (H2S) Amon�aco (NH3)
Tratamiento y disposici�n de desechos no peligrosos y estaciones de transferencia	Sulfuro de hidr�geno (H2S) Amon�aco (NH3)
Planta de tratamiento de aguas residuales	Azufre Total Reducido (TRS) <1>
Actividades que capten agua de cuerpos de agua receptores de vertimientos	Sulfuro de hidr�geno (H2S)
Tratamiento t�rmico de subproductos de animales	Sulfuro de hidr�geno (H2S) Amon�aco (NH3)
Unidad de producci�n pecuaria	Sulfuro de hidr�geno (H2S) Amon�aco (NH3)
Otras actividades	Azufre Total Reducido (TRS) <1> Amon�aco (NH3)